El domingo por la noche publicamos en eldiario.es una delicada información para el órgano más sensible de la justicia española: el Consejo General del Poder Judicial. El suplente de la dimisionaria Mercè Pigem está imputado por falsedad documental. Está o, más bien, estaba.
Casualmente, pocas horas después de que eldiario.es y más tarde otros medios difundiesen esta información, el juez instructor de esta causa penal decidió archivar el caso que complicaba el ascenso al Poder Judicial del hasta ahora imputado, Antonio María Álvarez-Buylla, decano del Colegio de Procuradores de Madrid.
Casualmente, el auto se envía el lunes pero el juez fecha el auto cuatro días antes: el jueves 27 de noviembre. Casualmente, el viernes no se mandó.
Casualmente, el 27 de noviembre es un día antes de que se conociese el suceso andorrano de la ya dimisionaria Mercè Pigem, la vocal nombrada por CiU a la que sorprendieron en la frontera con 9.500 euros en efectivo.
Casualmente, el auto de archivo se supone que no está notificado hasta mañana, 2 de diciembre. Pero ya lo está difundiendo a los medios el Colegio de Procuradores de Madrid, a pesar de que formalmente faltan unas horas para que el hasta ahora imputado, el señor decano, sepa de su existencia por la vía oficial.
Casualmente, es la segunda vez que el juez de instrucción decide archivar esta querella por falsificación documental. La primera vez le costó un rapapolvo de la Audiencia Provincial de Madrid, que le ordenó reabrir la investigación.
Casualmente, el archivo llega a pesar de que está pendiente otro recurso –sobre una ampliación de la querella– que tiene que decidir la Audiencia Provincial y que todavía no se ha pronunciado.
Casualmente, el oportuno archivo permitirá que Antonio María Álvarez-Buylla se convierta en nuevo vocal del Poder Judicial.
Casualmente, Antonio María Álvarez-Buylla fue nombrado por el PP. No como el siguiente en la lista de suplentes, que es de CiU, como la dimisionaria Pigem.
Casualmente, la oportuna dimisión, el oportuno suplente, el oportuno archivo, la oportuna fecha y todas estas carambolas de este deporte que otros llamarían billar permitirán que el PP amplíe su mayoría en el Poder Judicial y Carlos Lesmes, el presidente, no tenga que usar su voto de calidad.
Casualmente, todo esto pasa justo unos días antes de que el CGPJ se tenga que pronunciar sobre si el incómodo juez Pablo Ruz tiene que seguir en la Audiencia Nacional.