Cómo invertir en el sol
¿Qué hacer con esos pequeños -o grandes- ahorros que no queremos confiar al banco y ni mucho menos que dependan de los vaivenes de la bolsa? Ecooo, una empresa que promueve el cambio energético a un modelo más sostenible, propone invertirlos en instalaciones fotovoltaicas y socializar de esta manera la energía limpia que produce el sol.
Desde hace 11 años, la empresa, que forma parte del Mercado Social de Madrid, ha desarrollado instalaciones solares sobre tejado -para que la energía se genere donde se necesita y no se pierda nada en el transporte- y ahora hay en funcionamiento 65 plantas repartidas entre Castilla-La Mancha, Andalucía, Comunidad Valenciana, Madrid y Extremadura.
Cada persona que así lo quiera puede invertir en alguna de esas plantas con una participación mínima de 1.000 euros y convertirse en copropietario de esa instalación, una modalidad que la empresa llama Camino Solar. A cambio recibe una rentabilidad por la venta de la electricidad generada por la instalación proporcional a su porcentaje de participación. La vida útil de una planta fotovoltaica está en torno a los 30 años, según señalan los promotores.
Para los que no quieran invertir su dinero de manera indefinida, Ecooo propone lo que denomina Depósito Solar, que permite contribuir a la financiación de las plantas por un plazo limitado que va de los dos a los diez años, pudiendo retirar el depósito -de mínimo 1.000 euros- cada año pasados los dos primeros. En este caso, la rentabilidad es del 2% para los depósitos de menos de cinco años y del 3% para los de entre cinco y diez.
Al igual que en la modalidad de propiedad, los ingresos del depósito se obtienen de la venta de la electricidad que se realiza cada mes. Los ingresos los recibe cada inversor al trimestre. A pesar de la última reforma energética realizada por el Gobierno, que ha supuesto un enorme recorte a las instalaciones de energías renovables , la rentabilidad de las plantas de Ecooo sigue estando en torno al 6%, como señala su socio fundador, Mario Sánchez.
Además, para los que no tengan suficientes ahorros pero quieran contribuir a ese cambio de modelo energético y luchar contra el cambio climático, la empresa propone convertirse en copropietario a través de participaciones de 100 euros. La Desobediencia solar, como denominan a esta modalidad, tienen por objetivo “liberarse de las grandes corporaciones y […] y apostar por un modelo democrático, independiente, ciudadano, basado en energías limpias y renovables”, como señalan sus impulsores. La mayoría de las instalaciones están en naves industriales, a las que alquilaron sus techos para desarrollar las plantas. Otros paneles están en edificios municipales, como colegios o parques de bomberos.
Ecooo se autodenomina “no de lucro”, ya que si bien es una sociedad limitada -optaron por esta forma para no hacer partícipe a posibles socios de los créditos a los que aún deben hacer frente- es una empresa que no reparte beneficios de ningún tipo. Esas ganancias se invierten en generar un tejido social y campañas de divulgación del uso de energías renovables para “promover otro modelo energético”, afirma Sánchez.
