Eurodiputados españoles apoyan que la UE conceda privilegios a Emiratos en materia de visados
El Parlamento Europeo debatirá si Emiratos Árabe Unidos pasa a formar parte de una reducida lista de países cuyos ciudadanos no necesitan visado para entrar en la Unión Europea por periodos inferiores a tres meses. Varios eurodiputados españoles han secundado las enmiendas al texto inicial de la Comisión Europea, que solo pretende incluir en ese listado a una serie de pequeños países, islas del Pacífico y del Caribe.
Emiratos Árabes Unidos es el segundo destino de las exportaciones españolas en Oriente Medio, después de Arabia Saudí. En 2012, España consiguió 1.512 millones de euros en ventas al país. El rey Juan Carlos mantiene desde hace décadas una buena relación con los dirigentes de Emiratos, que incluso en 2011 le regalaron dos coches Ferrari que la Casa Real cedió a Patrimonio Nacional.
Eurodiputados de PP, PSOE y CiU han secundado algunas de las enmiendas para favorecer la entrada de los ciudadanos de Emiratos en la Unión sin necesidad de visado (Antonio López White, Agustín Díaz de Mera, Alejo Vidal-Quadras y José Ignacio Salafranca, del PP; Emilio Menéndez del Valle, del PSOE; y Salvador Sedo i Albart, de Unió). Tanto PP como PSOE han rechazado dar explicaciones acerca de este apoyo. Tampoco el Gobierno ha respondido a las cuestiones relativas a este debate.
El Parlamento Europeo plantea unas enmiendas a esa propuesta con las que incluye una sola modificación: que Emiratos Árabes Unidos tenga el mismo privilegio. Los parlamentarios de los veintisiete tendrán que decidir si salen adelante estas enmiendas con las que se premiaría, a través de la política de inmigración, a un Estado que incumple los estándares internacionales de los derechos humanos y, en concreto, los derechos laborales de los trabajadores inmigrantes.
El Comité para la Eliminación de la Discriminación Racial de la ONU ha instado al país del Golfo Pérsico a erradicar la explotación, los abusos y las malas condiciones de vida de los trabajadores extranjeros, que representan alrededor del 90% de la fuerza laboral. En su informe de 2012, Amnistía Internacional denunció que los empleados migrantes “no gozaban de protección adecuada contra la explotación y los abusos” e incluso, en ocasiones, les era retirado el pasaporte.
Otro de los aspectos preocupantes para la comunidad internacional es la discriminación de la mujer. El último caso sufrido por una inmigrante fue el de la ciudadana noruega a la que violó un compañero de trabajo en Dubai y, al denunciarlo, fue condenada a 16 meses de cárcel por consumo de alcohol, conducta indecorosa y mantener relaciones sexuales fuera del matrimonio. Las gestiones diplomáticas permitieron la puesta en libertad de la joven, a la que se había retirado el pasaporte.
A pesar de que la Unión Europea deja en manos de la reunión de los ministros de Exteriores las cuestiones “relativas a los derechos humanos que se plantean en el marco de las relaciones exteriores a través de la política exterior y de seguridad común o de la política comercial y de desarrollo”, los principios rectores de Europa se cimientan sobre el respeto a los derechos humanos. De hecho, la Unión incluye una cláusula de obligado cumplimiento sobre derechos humanos en los acuerdos comerciales, de cooperación y asociación con terceros países.
Sin embargo, en este caso, el Parlamento no hace ninguna mención a la situación de los derechos en Emiratos Árabes Unidos ni el texto recoge la petición de que se cumplan los requisitos internacionales. Los eurodiputados que plantean esta modificación confían en que “la medida recibirá un amplio apoyo por parte” y destacan los beneficios económicos, que estiman en 50.000 millones de euros, que la exención del visado supondrá para las arcas europeas: “Todos sabemos que, cuando los ciudadanos de este país viajan al espacio Schengen, lo hacen principalmente por motivos de negocios, ocio de alta calidad, atención médica (privada), o estudios y formación (completamente pagados y sin coste alguno para la UE)”, señalan los parlamentarios en la formulación de la pregunta sobre la inclusión de Emiratos en este listado privilegiado.
Los defensores de la idea –entre los que se encuentran miembros de PP, PSOE y CiU– sostienen que la entrada de Emiratos en el espacio Schengen es “la evolución natural de la relación excepcional existente”. Otro de los argumentos “sólidos e irrebatibles” para premiar al país del Golfo es que “no plantea problemas de inmigración o seguridad dado que hay menos de un millón de titulares del pasaporte de los Emiratos Árabes Unidos (que cumple las normas técnicas requeridas), a ninguno de los cuales se le ha denegado un visado Schengen o se le ha detenido por temas de inmigración o seguridad”.
Los propios parlamentarios reconocen que solo hay otro país de la zona que goza de tal privilegio (Israel) y que solo dos países islámicos figuran en la lista (Brunei y Malasia). Ni siquiera Turquía forma parte de los países a los que no se requiere visado para estancias cortas, a pesar de la estrecha relación con la Unión Europea, a la que se ha llegado a plantear su incorporación.