Comienza la ‘sinfonía’ de colores en las cumbres de La Palma
En las cumbres de La Palma ha comenzado la sinfonía de colores que por estas fechas, cada año, interpreta la primavera. Estos días, en concreto, han empezado a florecer, en varios puntos, los jardines de tajinastes rosados de La Caldera de Taburiente.
Estos parterres de altura, situados a unos 2.000 metros sobre el nivel del mar, sembrados por el personal del Parque Nacional, cuentan con más de 1.300 ejemplares de la citada planta (Echium wildpretii ssp trichosiphon) que, hace años, estuvo catalogada como especie en peligro de extinción. Los mismos se localizan en la zona del cortafuego de Garafía situada por debajo de la residencia del IAC en El Roque de Los Muchachos, justo en el límite entre el pinar y el codesar (esta parcela cuenta con unos 1.000 ejemplares); en los alrededores del Llanos de las Ánimas, en Puntagorda, cerca del cortafuego de El Reventón (unos 300 tajinastes rosados), y en las inmediaciones del Monumento al Infinito de César Manrique, en San Andrés y Sauces. Este es el grupo de plantas más pequeño.
Asimismo, el tajinaste rosado crece de forma silvestre en las cresterías de La Caldera de Taburiente.