“Los niños que juegan al ajedrez tienen una mayor satisfacción personal”
Los beneficios del deporte ciencia son incuestionables. La psicóloga palmera Lucía Rodríguez Fernández (Santa Cruz de La Palma, 1991), ha participado en su trabajo de fin de grado en la Universidad de La Laguna en un estudio global sobre el ajedrez como recurso educativo con escolares de La Palma y Tenerife. “El objetivo era analizar la relación entre la práctica del ajedrez y variables como adaptación, estilos de afrontamiento y rendimiento académico”, ha explicado a LA PALMA AHORA. “Como variable independiente tenemos un grupo experimental con 63 alumnos que practicaban ajedrez desde hace más de cuatro meses y con una regularidad de unas dos horas por semana, y como grupo de control, 176 estudiantes que no practicaban ajedrez”, añade.
Lucía Rodríguez se centró en la parte socioafectiva del ajedrez, un aspecto que, subrayó, “está menos investigado que el cognitivo y creo que habría que avanzar mucho más en él”. “Dentro de las variables dependientes, se ha aplicado una prueba de adaptación personal, social y escolar, y otra de estilos de afrontamiento; además, se ha recogido el rendimiento académico en matemáticas y lengua”, detalla. “Después de realizar los análisis, concluimos que existen diferencias significativas entre jugadores y no jugadores”, resalta. “Fundamentalmente, esas diferencias se destacan en el rendimiento académico, y también en el ámbito de la adaptación, centrada principalmente en la adaptación personal”, señala. “Los niños y niñas que juegan al ajedrez mostraron una mayor satisfacción consigo mismos y menores sentimientos de autoculpa y tristeza”. En la adaptación escolar, añade, “tuvieron una mejor actitud hacia el trabajo y aplicación del aprendizaje (hipolaboriosidad)”. Por el contrario, precisa, “no se observan diferencias significativas en el afrontamiento”.
En el estudio, realizado en 2014, intervinieron “63 niños y niñas que practican ajedrez desde al menos cuatro meses y con una frecuencia mínima de dos horas a la semana (grupo experimental) y 176 escolares que no juegan al ajedrez (grupo de control) de entre 8 y 14 años de colegios y clubes de La Palma y Tenerife”, señala Lucía, quien insiste en que “la adaptación personal es significativamente diferente entre los niños que juegan y los que no lo hacen”.
Esta joven psicóloga ha mostrado su agradecimiento a José Carlos Martín, máximo responsable del ajedrez en La Palma en los últimos 20 años y recientemente elegido presidente de la Federación Canaria de Ajedrez, por el apoyo recibido en la realización del referido estudio. “Me ayudó muchísimo y me puso en contacto con Gustavo de la Cruz, Maestro Fide, licenciado en Historia y monitor, que también colaboró mucho en el trabajo; todos los monitores se alegraron de que participara en la investigación”, aseguró. El agradecimiento lo hizo extensivo a colegios como el Gabriel Duque de Santa Cruz de La Palma, especialmente a su directora, que “me trató muy bien, porque otros centros no mostraron mucho interés”.
Precisamente, José Carlos Martín, en una entrevista concedida a LA PALMA AHORA el pasado mes de diciembre, apuntaba que el ajedrez “es una herramienta básica fundamental para que la escuela mejore; tiene aspectos pedagógicos que potencian la capacidad de razonar, de pensar de forma lógica, de planificar, de preguntarte siempre el por qué de las cosas, de mantener el cerebro despierto; las personas que juegan al ajedrez van un poquito por delante, me refiero a que planifican con anterioridad a los acontecimientos; en resumen, el ajedrez ayuda a pensar y, por tanto, todo lo demás que hagas te saldrá mejor”. La Palma, en el contexto regional, en el deporte ciencia,“es una potencia”, afirmó.
A Lucía le interesa particularmente la rama sanitaria de la psicología, aunque reconoce que “después de haber realizado este estudio sobre el ajedrez siento asimismo curiosidad por la rama educativa”. El próximo mes de septiembre comenzará un máster de Psicología General Sanitaria. “También me gusta la psicología deportiva, pero en Tenerife no ofertan este máster y me tendría que desplazar a la Península”, dice.
Una vez realizado el estudio, Lucía no duda en recomendar que“los niños jueguen al ajedrez, porque, cuanto más lo hagan, mejores resultados van a obtener tanto en los ámbitos cognitivos como socioafectivos”.