El Ayuntamiento preguntará a los madrileños si están de acuerdo con “mejorar el espacio peatonal de Gran Vía”
De la remodelación de la Gran Vía faltaba saber en qué consistirá la consulta ciudadana que el Ayuntamiento de Manuela Carmena anunció cuando explicó las líneas generales del proyecto. El consistorio ha concretado este viernes cómo será esa consulta. Las obras comenzarán previsiblemente en verano pero los madrileños votarán en febrero sobre cuatro cuestiones, entre ellas si están de acuerdo con que se amplíe el espacio para los peatones.
El Ayuntamiento de Madrid añadirá las cuatro preguntas sobre Gran Vía a la gran consulta ciudadana de febrero “para optimizar recursos económicos del Ayuntamiento”. Se preguntará así si se está de acuerdo en transformar la Gran Vía “en un proceso consultivo aprovechando la gran consulta ciudadana que se celebrará del 13 al 19 de febrero”.
El delegado de Participación Ciudadana, Transparencia y Gobierno Abierto, Pablo Soto, ha explicado que recibieron estas cuatro preguntas por parte de los técnicos y decidieron incluir las cuatro. La consulta solo incluirá una pregunta sobre los detalles de la próxima consulta como son los pasos de zefra (pregunta dos).
El concejal de Urbanismo de Ahora Madrid, José Manuel Calvo, explicó las líneas generales del proyecto el pasado 11 de enero. La futura Gran Vía que priorizará al peaton será una “plataforma única”. Esto significa que la calle no tendrá aceras y carriles para vehículos, sino que tendrá un pavimento continuo en el que se colocarán “bolardos” para gestionar la afluencia de tráfico de modo que sea flexible. “Para ajustar las necesidades en cada momento”, según indicó Calvo. Según estas necesidades se podría habilitar uno o dos carriles para los vehículos. Por tanto, se descarta, por el momento, la peatonalización completa de esta calle.