Simpatizantes de Vox piden al partido que oculte sus identidades en los actos públicos

Vox pixela la cara de algunos asistentes a un acto de partido celebrado este fin de semana en la localidad cántabra de Castro Urdiales entre simpatizantes y afiliados de Cantabria y del País Vasco. La formación ultraconservadora ha enviado un comunicado a los medios sobre el 'Café Tertulia', tal y como han denominado al encuentro, con una fotografía adjunta de sus protagonistas en el hotel donde se ha celebrado, en la que se pueden apreciar los rostros difuminados de tres mujeres y cuatro hombres. 

Este medio se ha puesto en contacto con este partido para conocer cuál es la razón de que los afines a sus ideas -ultracatólicas, contrarias al colectivo LGTBI, a la acogida de refugiados y que abogan por el “control de la inmigración, especialmente la originaria de países musulmanes”, entre otras posturas, quieran ocultarse públicamente. 

“La gente tiene bastantes problemas a la hora de poner su cara, por negocios y familia, y de darse a conocer como un partido de centro-derecha”, señala Laly García, representante de la ejecutiva del partido en Cantabria. 

“Por eso tienen que salir pixeladas, la propia persona nos lo pide”, recalca. Asegura que todas esas personas pertenecen a la provincia de Vizcaya, “que sienten que no pueden expresar una opinión diferente en un momento dado”. “Es gente activa, que siempre está, pero que nos han pedido por favor pixelemos sus caras”, remarca. 

No obstante, se ponen en la foto porque, según cuenta García, quieren tenerla “a nivel personal, en su álbum particular, en su casa, en su móvil o en su ordenador”. “Esa foto se ha hecho normal y después se ha pixelado para mandar a los medios”, concluye.

Auge de la ultraderecha

Vox es un partido con escasa actividad en la escena política de Cantabria. A pesar de ello, ha salido recientemente a la palestra para posicionarse de lado del colectivo tránsfobo HazteOir, ya que ambos rechazaron el anteproyecto de ley LGTBI de esta comunidad autónoma, que garantiza el tratamiento hormonal para menores transexuales y que prohibe suscribir conciertos o conceder ayudas a centros educativos que discriminen al alumnado por orientación o identidad sexual, entre otras cuestiones.

En las anteriores elecciones autonómicas celebradas en 2015, esta formación apenas obtuvo 1.000 votos en Cantabria. Sin embargo, presume en la nota de prensa de que durante el pasado mes de septiembre ha experimentado un incremento de afiliación del 23% en la Comunidad. Se trata de un periodo en el que, como consecuencia del conflicto catalán en el que esta formación se querelló contra Puigdemont solicitando al Tribunal Superior de Justicia de Cantabria que lo detuviera, se ha constatado un auge de la ultraderecha en España. 

Por su parte, Vox ha participado activamente en las manifestaciones 'unionistas' celebradas recientemente, organizadas por Societat Civil Catalana (SCC) y secundadas por grupos de ultraderecha como Somatemps, Plataforma x Catalunya, Falange Española de las JONS, Generación Identitaria, Falange Auténtica, Som Identitaris, y Los de Artós.

Su presidente, Santiago Abascal, es también secretario de la Fundación DENAES (Defensa de la Unidad de España) que convocó el pasado 30 de septiembre una concentración en la Plaza de Cibeles de Madrid que terminó con un numeroso grupo de los asistentes entonando el 'Cara al sol' con los brazos en alto, en su mayoría jóvenes. 

Durante estos últimos meses, los actos y manifestaciones de esta índole, de carácter violento, han sido una constante en varios puntos de España, como la concentración a las puertas de la Asamblea de Unidos Podemos en Zaragoza, los altercados provocados en la manifestación del 9N en Valencia, o la movilización de ultras de esta ideología en el acto de Pablo Iglesias en Santander.