La negociación de los presupuestos acerca a PSOE y Podemos y cabrea al PRC
Ni hay fumata blanca ni se la espera. Salvo sorpresa de última hora, los próximos presupuestos de Cantabria saldrán adelante con el voto de un tránsfuga, el del exdirigente de Ciudadanos, Juan Ramón Carrancio. La reunión entre PRC, PSOE y Podemos ha terminado sin acuerdo y, aunque nadie da por terminadas las conversaciones, no hay ningún atisbo que haga pensar que los tres diputados podemitas cambiarán el sentido de su voto.
La reunión celebrada en la tarde de este miércoles en el Parlamento de Cantabria se ha prolongado durante algo más de una hora y al terminar ha habido más reproches que llamamientos a la esperanza. PRC y PSOE acusan al partido de Pablo Iglesias de hacer “imposible” un pacto debido a sus “líneas rojas”, mientras que Podemos responsabiliza a los de Revilla de “bloquear” sus propuestas.
Así, el encuentro forzado por el nuevo secretario general de los socialistas, Pablo Zuloaga, para evitar que las cuentas de 2018 se manchen con el apoyo de “un tránsfuga de libro” parece haber caído en saco y lo más que ha conseguido es enfadar a sus socios de Gobierno. Los regionalistas, más preocupados por tener el presupuesto en vigor el 1 de enero que de dónde provenga el apoyo que el bipartito necesita para salvar su minoría en la Cámara autonómica, están que trinan con los movimientos del “nuevo PSOE”.
En el PRC ya tenían asumido como mal menor cargar con Carrancio y esperaban tranquilos, siguiendo su hoja de ruta, culminar la tramitación este viernes. Una nueva reunión con Podemos no entraba en sus planes y menos que fuese promovida por los socialistas. De hecho, uno de los mayores reproches vertidos por los regionalistas ha sido el haberse sentado a la mesa de negociación sin conocer las propuestas de Podemos, que se las trasladó a Zuloaga, cuando este ni es diputado ni miembro del Gobierno, tal y como ha enfatizado su portavoz, Pedro Hernando.
Por contra, como gesto de buena voluntad y disposición al acuerdo, Podemos había retirado esta mañana 68 de las 99 enmiendas parciales que habían presentado al presupuesto, manteniendo el resto relacionadas con vivienda, mundo rural, innovación y desarrollo y renta social básica, y cuya aprobación “es vital para alcanzar un acuerdo definitivo”.
“La dirección socialista se ha encontrado con el bloque regionalista en contra, en una situación en la que entendemos que están saboteando el posible acuerdo sin renunciar a aprobar el presupuesto con un tránsfuga, además de no estar dispuestos a aceptar propuestas que ya habíamos acordado con ellos y que benefician a la mayoría social de Cantabria, como son la Renta Social Básica o el plan de vivienda, ha manifestado al término de la reunión Verónica Ordóñez.
La diputada, que acudió a la reunión junto al diputado José Ramón Blanco, la responsable de Participación de Podemos, Mercedes González, y el responsable de Acción Institucional, Luis del Piñal, han mostrado su decepción por la actitud del partido regionalista, sobre todo en aquellos asuntos de vital importancia que ya fueron aprobados en 2015, y que ahora están siendo rechazados en cada una de las reuniones mantenidas. “La Renta Social Básica y la vivienda son dos cuestiones que han hecho que este Gobierno esté gobernando. Obviamente, señala, ”no podemos renunciar a algo que ya estaba aprobado“, ha remarcado.
Desde el PSOE, su portavoz, Víctor Casal, juega entre dos aguas. Por un lado se posiciona junto a su socio de Gobierno y critica que Podemos ha llegado a esta reunión con unas “líneas rojas muy marcadas” y sin “ningún tipo de cintura para negociar”, mientras que por otro reitera la disposición de su partido a alcalzar acuerdos con los podemitas. Las negociaciones continuarán este jueves, a contrarreloj y pendientes de fijar una nueva hora.