La Audiencia avala la investigación de tráfico de influencias del exalcalde de Bermeo
La Audiencia de Bizkaia ha avalado la investigación por presunto tráfico de influencias del exalcalde de Bermeo Juan Karlos Goienetxea (EH Bildu) en la reclasificación de un solar para construir 40 pisos. El alto tribunal considera que la instrucción del caso, iniciada en 2013, ha revelado que “existen datos que evidencian una irregular actuación urbanística”.
Un vecino presentó una demanda en la que sostiene que el Ayuntamiento cambió un terreno en el barrio bermeano de San Miguel de urbanizable a urbano sin informes técnicos que lo avalasen, lo que ha supuesto un beneficio de tres millones de euros. Se implica también a un constructor que promovió las viviendas “con quien tiene relaciones de amistad” el ex alcalde y que Goienetxea hizo “notas manuscritas e indicaciones que se elevaron a definitivos” en el Plan General de Urbanístico que avaló el cambio. El Ayuntamiento, gobernado por Bildu, defiende esta operación. Esta investigación motivó en octubre pasado la renuncia de Goienetxea (quien fue alcalde de Bermeo durante 16 años) a su cargo de concejal de Urbanismo que ocupaba en el Ayuntamiento de Bermeo, aunque proclamó su inocencia.
La Audiencia de Bizkaia ha intervenido en el caso tras la petición de los dos imputados, el ex alcalde y el constructor, que rechazaban sus imputaciones y pedían que se levantase la paralización de las obras dictada por el juzgado. La Audiencia, en un auto dictado el pasado 31 de marzo, estima la petición de que los trabajos de construcción continúen al estimar que, en caso de sentencia condenatoria, se podrían derribar las viviendas.
Pero defiende la investigación del juzgado y rechaza, como sostienen los imputados, que “no existen indicios de delito”. El alto tribunal afirma que además de los “indicios de una ilegalidad administrativa consistente en haber cambiado la clasificación de suelo urbanizable a urbano sin reunir los requisitos y condiciones para ser suelo urbano”, la modificación urbanística se realizó “en contra de lo informado” por la asesoría urbanística externa del Plan General y “sin que se tenga constancia de la existencia de previo informe técnico jurídico” que lo avalase.
El denunciante es propietario de terrenos colindantes al solar reclasificado y en 2008 pidió que pasaran de urbanizables a urbanos. Este cambio es sustancial ya que evita, en caso de una actuación urbanística, importantes gastos: no hay que pagar al ayuntamiento costes de urbanización, ni entregar al municipio el 10% de los aprovechamientos urbanísticos y se exime de la obligatoriedad de edificar un 65% de vivienda protegida, con bastantes menos márgenes de beneficio que la libre.
La solicitud de reclasificación fue denegada por el Ayuntamiento de Bermeo en 2008 y posteriormente el constructor imputado, Tomás Tardío, que empezó a comprar terrenos en la zona, también pidió el cambio, rechazado igualmente por los técnicos municipales. Hasta que en 2012 logró la modificación urbanística.