El Comité de La Naval exige al Gobierno que “tome el control” del astillero y pide responsabilidades a los accionistas

El comité de empresa de La Naval de Sestao, que próximamente entrará en concurso de acreedores, ha exigido al Gobierno vasco que “tome el control” del astillero y ha pedido “responsabilidades” a los accionistas mayoritarios por la gestión de “los últimos 10 años”, que, en su opinión, ha llevado a la compañía a la actual situación.

En rueda de prensa en la planta sestaoarra, el presidente del comité de empresa, Pedro González, y el secretario de este órgano, Juanjo Lloré, han criticado duramente tanto al Ejecutivo central, que en 2006 permitió la privatización de La Naval, como al Gobierno vasco que, según han añadido, la consintió.

También han arremetido contra los accionistas mayoritarios, Astilleros Murueta e Ingeteam, a cuyos responsables ha acusado de mantener “sin control” la empresa en la última década, y actuar “para enriquecerse, pensando más en sus empresas vinculadas que en el futuro del astillero”.

El comité ha anunciado que comenzará un encierro en La Naval el próximo miércoles y lo mantendrá durante 24 horas, hasta el jueves, día en el que prevé reunirse con los accionistas de la compañía para recibir “todas las explicaciones” necesarias y conocer la situación real de la compañía. También la próxima semana celebrará una manifestación en la Margen Izquierda.

Reuniones con PSE-EE y PNV

El comité, que iniciará este lunes sus reuniones con todos los partidos políticos -se reúnen con representantes del PSE-EE y del PNV-, está a la espera de recibir respuesta de la consejera de Desarrollo Económico e Infraestructuras, Arantxa Tapia, a la que han pedido un encuentro. El lehendakari Urkullu ha descartado inyectar dinero público a una empresa con una deuda millonaria: 150 millones de deuda con la banca, 51 millones de fondos propios negativos al cierre de 2016 y unas pérdidas acumuladas en 2015 y 2016 de 95 millones de euros. Las subvenciones públicas para La Naval fueron de 5,5 millones de euros

La falta de nueva financiación -confirmado ya en la junta de accionistas extraordinaria celebrada el pasado miércoles que el inversor Manuel Del Dago no cumplirá sus compromisos financieros- forzaron a La Naval a entrar en concurso de acreedores. Lo que se espera es que la entrada en concurso sirva para la continuidad de la empresa, pero las perspectivas, si no hay dinero fresco, es el cierre del astillero centenario. La Naval cuenta con 1.800 empleos, 215 conforman la plantilla fija del astillero, mientras que el resto está integrado por contratas externas.

El PSE-EE ha respaldado este lunes, durante la reunión que ha mantenido en Bilbao con el comité de empresa de La Naval, la propuesta sindical de impulsar una mesa de negociación con la participación de empresarios, sindicatos e instituciones que se impliquen en la búsqueda de una solución. A la reunión a acudido la líder de los socialistas vascos, Idoia Mendia, entre otros dirigentes del PSE-EE.