La jueza Servini viaja a España para investigar los crímenes del franquismo
Los impulsores de la querella contra el franquismo tienen una buena noticia, tras los reveses sufridos en su lucha por investigar los crímenes de la dictadura española en los tribunales españoles. La juez argentina María Servini de Cubria, encargada de la investigación por crímenes de genocidio y de lesa humanidad cometidos por la dictadura franquista desde el 18 de julio de 1936 hasta el 17 de junio de 1977, llegará a España este fin de semana para continuar in situ sus pesquisas sobre la represión franquista.
La querella 4591-10 no se detiene. La titular del Juzgado Nacional en lo Criminal y Correccional Federal número 1 de Buenos Aires tiene previsto hacer una gira en España por diversas localidades para tomar declaración a varios de los querellantes que por motivos de movilidad y edad no han podido relatar aun ante la jueza argentina las torturas y los crímenes sufridos durante la dictadura franquista.
Las últimas decisiones adoptadas por la Audiencia Nacional de negar las extradiciones de algunos de las personadas denunciadas como torturadores habían supuesto un jarro de agua fría -en parte esperado- para todas las víctimas del franquismo y las plataformas memorialistas que impulsaron la querella en Argentina ante la imposibilidad de que los jueces espña investigarán los hechos en España.
La magistrada argentina revolucionó la investigación al solicitar la extradición a Argentina del exinspector Antonio González Pacheco, 'Billy el Niño', y del excapitán guardia civil Jesús Muñecas Aguilar. Ambos están siendo investigados en relación a las denuncias de tortura presentadas contra ellos por varias personas que fueron detenidas durante los últimos años de la dictadura franquista franquismo. Sin embargo, recientemente, las Secciones Segunda y Tercera de la Audiencia Nacional han rechazado entregar a ambos supuestos torturadores al considerar que los hechos de los que se les acusa han prescrito.
Pero la decisión de la jueza argentina de viajar a España para profundizar en la investigación ha supuesto una inyección de moral para los grupos memorialistas. “Estamos muy contentos por esta noticia porque la visita de la jueza Servini va a suponer un impulso tremendo a la investigación. Es un salto cualitativo”, señala Josu Ibargutxi, portavoz de la asociación memorialista vasca Goldatu y uno de los querellantes.
Un miliciano de 97 años
Aunque los trabajos de investigación que va a realizar la jueza argentina no están cerrados, en principio su intención es llegar el sabado 17 de mayo por la noche a Madrid y al día siguiente viajar a Euskadi para empezar a interrogar a los afectados. En principio, en el País Vasco está previsto que tome declaración a tres personas: Félix Padín, un miliciano de 97 años que luchó en la Guerra Civil y que, tras el triunfo de las tropas franquistas, pasó por varios campos de concentración (campos de trabajo los denominaban las autoridades franquistas), entre ellos el de Miranda de Ebro, donde fueron recluidos muchos antifranquistas vascos. Padín, que tiene la memoria muy engrasada y la mente en perfectas condiciones, según las personas que le conocen, está sin embargo postrado desde hace años en un silla de ruedas.
La jueza tomará declaración también en Euskadi a los hemanos Kalzada. Julen Kalzada fue uno de los 16 curas vascos que estuvieron recluidos durante el franquismo en la famosa cárcel de Zamora y también fue condenado en el Proceso de Burgos. Ambos, además, relatarán a la jueza argentina el fusilamiento de su padre en 1937 en la localidad vizcaína de Busturia, cuando las tropas franquistas ya habían tomado la localidad.
El periplo de Servini continuará después en Sevilla, hacia donde se desplazará el próximo 21 de mayo. Allí tiene previsto tomar declaración a otros tres querellantes. Según el cronograma oficial, pendiente aún de retoques de última hora, la jueza acudirá el domingo 25 Málaga. Allí visitará el cementerio de San Rafael, en donde se halló la mayor fosa común de la dictadura con 4.500 cuerpos de la represión franquista. Finalmente, Servini se desplazará a Madrid en donde tomará declaración a más querellantes y visitará el Archivo Histórico Nacional, entre otros cometidos que tiene previstos realizar para recabar documentación e información en la capital española.
Josu Ibargutxi, de Goldatu, la asociación de presos y represaliados vascos de la dictadura franquista, está exultante después de tanto revés en la Audiencia Nacional. “Lo que es una desgracia es que tenga que venir una jueza del extranjero para investigar los crímenes de la dictadura porque en este país los jueces tienen cerradas las puertas y tapada la boca para escudriñar los 40 años de horror de la dictadura franquista”, denuncia.
