Fagor, General Electric y Xey: 700 empleos industriales vascos en el aire en menos de una semana
Semana negra en Euskadi para el empleo industrial, el de mayor calidad en estos momentos en el mercado laboral vasco. Muebles Xey, ubicada en Zumaia (Gipuzkoa) su suma a los anuncios de cierre de General Electric y la catalana CNA, que iba a reflotar la ‘nueva Fagor’. Alrededor de 667 empleos (170 de Muebles Xey; 147 de General Electric y 350 de CNA) industriales corren serio riesgo de desaparecer en su totalidad o, al menos, en su mayor parte.
La última en sumarse a la lista de cierres ha sido Muebles Xey, cuya plantilla se mantendrá en huelga indefinida a la espera de la reunión que ha solicitado al Gobierno Vasco, uno de los accionistas de la empresa, para reclamarle “una salida” y la búsqueda de un inversor que “apueste” por mantener la actividad de la firma guipuzcoana de muebles de cocina. El Ejecutivo de Vitoria es el propietario de un tercio del accionariado de la firma, en la que entró hace alrededor de cuatro años y en la que dispone de 1,3 millones de euros de capital.
Los trabajadores de Muebles Xey han pasado de confiar en la viabilidad de la empresa a estar sin cobrar desde marzo. Fuentes del comité de empresa aseguran que en febrero la dirección les informó que la facturación alcanzada en 2016, 25 millones de euros, era “la necesaria” para “tirar adelante con la actividad y que solo necesitaban ”unos meses de tiempo“ para poder hacer otra inversión y fuera todo ”como la seda“. ”Ahora nos dicen que no hay dinero, que Xey no tiene futuro y que no se puede continuar y liquidan la empresa“, se quejan.
Algo similar es lo que están viviendo los trabajadores de la planta que General Electric tiene en la localidad vizcaína de Ortuella. “Hasta la fecha había asignada carga de trabajo y de la noche a la mañana se ha renunciado a la producción de dicha carga, además del desvío de trabajo a otras plantas del grupo”, lamentan desde el comité de empresa. Apenas año y medio ha durado la planta.
Mientras, el grupo catalán CNA, que se hizo con Fagor Electrodomésticos tras su quiebra, no ha podido reactivarla empresarialmente. CNA se hizo con las riendas hace tres años y por lo que se ve ha llegado al final del camino. El Gobierno vasco ha tachado de “intolerable” la actitud de la dirección ante la presentación de un preconcurso de acreedores. “Es intolerable. El crédito con el Ejecutivo autónomo se ha terminado”, ha llegado a decir la consejera de Desarrollo Económico y Competitividad, Arantxa Tapia.
El grupo catalán había comprado el negocio de la antigua Fagor Electrodomésticos, propiedad de Mondragón Corporación Cooperativa (MCC), hace menos de tres años en una subasta judicial por 42,5 millones. Se inició la nueva etapa productiva en las plantas de Garagarza, en Mondragón, y Eskoriatza y posteriormente se fue sumando el resto del negocio.
La industria ha sido tradicionalmente el motor de la economía vasca y una de sus señas de identidad. Por eso, el nivel de preocupación ha ido en aumento a medida que se han ido conociendo estos cierres cuando se estaban lanzando mensajes de recuperación económica.