El Gobierno arremete de nuevo contra el Grupo Mondragón
La consejera de Desarrollo Económico Arantza Tapia ha vuelto a arremeter contra una gran empresa vasca. Y de nuevo ha sido contra el Grupo Mondragón, a quien en enero le concedió ayudas públicas por 40 millones destinadas a un plan de viabilidad de Fagor Electrodomésticos que nunca se ejecutó. Este miércoles, en una comisión en el Parlamento vasco para informar de la situación de la cooperativa de electrodomésticos (con todas sus plantas cerradas), ha afirmado : “Con más de 800 millones de euros de pérdidas en cinco años, podía haberse gestionado mejor”, ha señalado.
En los últimos meses, el Gobierno vasco nunca ha tenido tantos desencuentros, sobre todo de manera pública, con las empresas de Euskadi. Se ha embroncado con la patronal Confebask por el decaimiento de los convenios colectivos, con el mayor grupo empresarial vasco (Mondragón) por la crisis de Fagor Electrodomésticos y Tubacex, el segundo fabricante del mundo de tubos sin soldadura en acero inoxidable, ante la decisión de instalar una planta en Cantabria.
La consejera Arantza Tapia ha advertido a la Corporación Mondragon que debe “repensar” su modelo concreto, con el fin de “reforzar” su competitividad. Opina que será necesario debatir sobre su sistema de financiación, basado en las cuotas de sus socios, que ha calificado de “insuficiente” en la situación actual. Considera que el grupo empresarial, el primero de Euskadi y el séptimo de España con más de 80.000 trabajadores, necesita un órgano de dirección con mayor capacidad de “liderazgo” y de actuación sobre el conjunto de sus cooperativas.
Ha defendido la manera en la que ha actuado el Gobierno autonómico ante este problema, como la concesión de las ayudas de 40 millones en apenas dos semanas, cuando estas operaciones suelen requerir seis meses, cuya consecuencia ha sido el uso de ese dinero para tapar las deudas de Fagor Electrodomésticos.
apia ha manifestado que la Corporación se comprometió a reubicar en otras empresas del grupo a los cooperativistas de Fagor “en la posición de otros trabajadores que no lo son”. De esa forma, ha expresado su preocupación por los empleados eventuales que podrían perder su trabajo para dar cabida a los cooperativistas. “Al Gobierno vasco le preocupan igual los cooperativistas que los no cooperativistas”, ha explicado. Ha afirmado que la Corporación “no ha dicho” aún cuántos trabajadores eventuales perderán su empleo por estas recolocaciones.
