El Gobierno vasco echa balones fuera en el supuesto fraude de Hiriko

A pesar de la pérdida de casi 18 millones de euros de dinero público -15 millones procedentes del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero a cambio del apoyo del PNV y 2,7 millones del propio Gobierno vasco-, para el actual Ejecutivo no hay responsabilidad alguna en los partidos que apoyaron el proyecto.

De hecho, Josu Erkoreka ha afirmado que si existen “responsables criminales” en el caso del proyecto fallido Hiriko serían los “responsables de las empresas” que recibieron los fondos públicos y ha defendido la “regularidad jurídico administrativa” de los ayudas concedidas por el Ejecutivo autónomo al proyecto. De esta manera, agarrándose al argumento legal, ha evitado asumir cualquier responsabilidad política de un fiasco que ha supuesto la pérdida de caudales públicos, además de la merma de imagen de la industria vasca.

Como argumento exculpatorio de las responsabilidades politicas, el portavoz ha puntualizado que los “destinatarios” de esa querella son las personas responsables de las empresas del consorcio y ha obviado que muchos de dichos promotores son personas afines al PNV. “Los posibles protagonistas de esas acciones, los responsables criminales, de existir en relación con esas imputaciones, serían las personas responsables de esas empresas que recibieron esos y otros fondos”, ha añadido.

Por su parte,  la consejera de Desarrollo económico, Arantza Tapia, se ha limitado a referirse a las ayudas que el proyecto percibió del Gobierno vasco, como consecuencia de la presentación de un proyecto de investigación a la convocatoria Etorgai de 2010. “Tenía ayudas a los largo de los años 2010, 2011 y 2012”, ha puntualizado.

Según ha apuntado, al evaluarse como “un proyecto de riesgo” se analizaron los resultados obtenidos en cada uno de los ejercicios para ir otorgando la financiación. En 2010 la subvención se elevó a 817.118 euros, de 906.046 euros en 2011 y de 927.229 euros en 2012, lo que elevó la cifra a un total de 2.650.413 euros.

Tapia ha indicado que, analizado el 2012, para ver “si realmente se habían cumplido los hitos y los objetivos que se habían marcado”, destaca que “algún hito que no se había cumplido, con la consiguiente solicitud de devolución por parte de algún pago que se había efectuado e incluso el impago de una pequeña parte de esa subvención”.

“Por parte del Gobierno vasco se ha hecho un seguimiento exhaustivo de todo el proceso administrativo y los hitos y objetivos que se habían planteado y no observamos problemas en esos tres años”, ha dicho.

Sin ofertas por las instalaciones de Epsilon

La consejera ha insistido en que las cuentas de los tres ejercicios se encuentran auditadas, “y no se ha encontrado ningún problema a ese respecto”. Ha añadido que, como resultado de estoS proyectos, se preveía la consecución de tres patentes, en estos momentos propiedad de las empresas del consorcio, y que “ninguna se ha perdido”.

“Junto con esa noticia de que se iba a iniciar una investigación, el fiscal ha dicho que no va a haber peligro, que no hay alzamiento de bienes como se había acusado, y que esa querella quedaba archivada”, ha añadido.

Tapia ha señalado que “otra cosa es que, como consecuencia de ese proyecto de investigación, que cumplió prácticamente todos los hitos y en caso de que no los cumpliera se solicitó la devolución, no se haya conseguido la transferencia al mercado y la puesta en marcha del vehículo, como tal”. “Es ahí donde hemos encontrado el proyecto fallido”, ha dicho.

Por otra parte, en relación a las instalaciones del proyecto fallido de Epsilon, Tapia ha señalado que, en la actualidad, no existen ofertas para su adquisición y ha precisado que sí hubo posibilidades que, finalmente, no culminaron.