El alcalde de Sestao no dimite y se limita a pedir disculpas
Lejos, muy lejos de la dimisión. Así se ha mostrado el alcalde de Sestao, Josu Bergara (PNV), en su primera comparecencia pública tras salir a la luz la grabación con sus críticas e insultos a los inmigrantes. Bergara solo se limitó a pedir disculpas por unas declaraciones que considera “inadecuadas”. Solo disculpas, nada más. En una comparecencia, en la que no permitió preguntas de los periodistas y en la que contó con el apoyo de un centenar de vecinos, Bergara se ha escudado en que sus declaraciones se referían a “los delincuentes” y no a los inmigrantes en general.
En las grabaciones, realizadas por uno de los asistentes a una reunión celebrada en el ayuntamiento en junio de 2013 entre varias inmobiliarias y el regidor peneuvista, se escucha decir a Josu Bergara: “Como no les quiere nadie, la mierda a Sestao. ¡Pues no! La mierda ya no viene a Sestao; si no, la echo yo. La echo yo. Ya me encargo yo de que se vayan; ya me empeño yo en que se vayan. A base de hostias, claro”.
“Voy a seguir luchando contra el incivismo y contra la delincuencia, no contra la inmigración. Es a este grupo de personas, a los delincuentes, a los incívicos a los que me refiero en la citada grabación cuando hablo de mierda. Una grabación que está manipulada”.
“Aúpa Josu”
Durante su comparecencia, un centenar de ciudadanos ha apoyado al alcalde al grito de “aúpa Josu”, “el pueblo está contigo Josu”. Una de las vecinas ha llegado a afirmar que “para una persona que tiene dos cojones van y la denuncian, ¡no hay derecho!”. En el lado contrario unas pocas personas han expresado su rechazo al alcalde con un pancarta en la que se leía “fuera alcaldes racistas”.
En otro momento de las grabaciones, realizadas de manera oculta y sin que el alcalde lo supiera, Bergara asegura: “Yo no voy a prohibir que venga gente extranjera porque es imposible, pero la gente que no quiera nadie, que no venga a Sestao”.
Según Bergara, las palabras fueron pronunciadas en un momento de tensión en una reunión que mantuvo con inmobiliarias “para evitar que en Sestao haya más pisos patera. Pisos en los que se hacinan familias enteras en condiciones higiénicas y salubres no aceptables”. De esta forma ha intentado contextualizar los hechos al referirse a los problemas de convivencia que se han producido en el barrio de Txabarri de Sestao. En ese barrio, los alquileres bajos supuestamente estarían atrayendo a inmigrantes y habrían aumentado los problemas, según ha denunciado una asociación de vecinos.
Las grabaciones están incluidas en la denuncia que se ha interpuesto en los juzgados de Barakaldo (Bizkaia) en la que se acusa al alcalde del PNV de prevaricación -por oponerse a empadronar a inmigrantes y gitanos- con el agravante de racismo. La denuncia está impulsada por SOS Racismo y la presentan cinco familias rumanas y otras dos personas a título personal. SOS Racismo defiende que el objetivo último del alcalde es echar a los extranjeros. Se da la circunstancia de que antes de ocupar la alcaldía, Bergara fue director de Igualdad y Derechos Ciudadanos de la Diputación foral de Bizkaia.
Al trascender la noticia, el PNV alegó que se trataba de un problema de convivencia, no de racismo y veía una clara intencionalidad política, al producirse la denuncia en plena campaña electoral.
Algunos de los afectados presentaron varias quejas ante el Ararteko (Defensor del pueblo vasco) que recriminó la actitud del alcalde de poner trabas al empadronamiento de determinados colectivos en riesgo de exclusión social. En concreto, se critica el elevado “número” de quejas tramitadas, así como la “actitud” de los responsables del consistorio a “la hora de admitir nuestras consideraciones”. El Ararteko recomendaba al Ayuntamiento “adecuar a la legalidad” esta situación denunciada, que impide a los afectados acceder a derechos básicos como la sanidad o la educación. Sobre este asunto, el regidor no se ha pronunciado.