Osakidetza suprime una piscina que ayuda a rehabilitar a 700 personas al año
La piscina terapéutica del Hospital Universitario de Álava (en su sede de Txagorritxu) lleva a pleno rendimiento y satisfacción de los usuarios desde 1977. El año pasado, un total de 700 personas la utilizaron en sus procesos de rehabilitación. Sin embargo, Osakidetza entiende ahora que se trata de un servicio prescindible y que no está demostrado su valor terapéutico. Después de 37 años descubre ahora que no tiene valor terapéutico. Al menos eso es lo que ha trasladado a los profesionales y lo que recoge en su plan de remodelación del servicio de rehabilitación del HUA, al suprimirla. El núcleo del servicio de Rehabilitación se concentrará a partir del próximo año únicamente en el Hospital de Santiago, dentro del proceso de reorganización del HUA en el que se ha embarcado el Departamento de Salud. Los sindicatos y los profesionales creen que la decisión de suprimir la piscina pública conllevará la privatización de este servicio.
ELA recuerda que en Gipuzkoa ya se vivió el cierre de las piscinas terapéuticas de los hospitales y se privatizaron “mediante conciertos” con empresas privadas. “Resulta evidente que el cierre de la piscina de Txagorritxu provocaría una situación similar”. “¿Qué es cara de mantener? Seguro que la larga resulta más caro pagar la recuperación en pisicinas privadas”, advierte una de las fisioterapeutas de Txagorritxu.
El equipo de Rehabilitación de los hospitales de Santiago y Txagorritxu asegura que Osakidetza siempre ha considerado la rehabilitación como “un servicio de inferior categoría, cuando es el destino final de pacientes con patologías tan importantes como enfermedades reumáticas, neurológias, urológicas, traumatológicas y cardíacas”. Se trata de uno de los servicios con más volumen de pacientes al día.
El servicio de rehabilitación se oferta en los tres Hospitales de Álava (Santiago, Txagorritxu y Leza) y sus instalaciones han sufrido diferentes obras los últimos años. La dirección del HUA contempla ahora una nueva remodelación que integraría el conjunto del servicio en Santiago, pero prevé menos espacio y el cierre de la piscina terapéutica. Se trata del cuarto plan que plantea la dirección en los últimos meses. La dirección del Hospital Universitario de Álava ha presentado a la plantilla el cuarto plan de obras. “Plan tras plan, la dirección improvisa modificaciones y en ningún momento ha abierto un cauce de participación a la plantilla para que manifieste las necesidades de este servicio”, recalca ELA.
“Servicio de Segunda B”
Javier Durana, delegado sindical de UGT en Txagorritxu, también coincide en que la supresión de la piscina apunta a la posterior privatización del servicio. “Si quitas un servicio público que funciona bien y a satisfacción de los pacientes, ¿qué va a pasar? ¿Se va a dejar de ofrecer?”. Mientras, Raúl Castillo, delegado de LAB en Txagorritxu, apunta que los profesionales de Rehabilitación están “totalmente en desacuerdo con los planes de la dirección para reorganizar el servicio, máxime si conlleva menos espacio y menos oferta para los pacientes”.
Los profesionales abundan en la idea de que Osakidetza les “relega al último rincón que dejan otros servicios, por lo que nos siguen considerando como servicio de Segunda B, careciendo de instalaciones dignas donde desarrollar nuestro trabajo”.