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Otegi evita el cuerpo a cuerpo con la Fiscalía del Estado sobre su inhabilitación
Arnaldo Otegi tiene su propia hoja de ruta como candidato a lehendakari por EH Bildu. El líder de Sortu considera que “la partida” que se está jugando en estos momentos “no es con el Estado, sino con nuestro pueblo”. Tal vez por eso el mismo día que la fiscal general del Estado, Consuelo Madrigal, anunciara que informará a la Junta Electoral de las condenas que pesan contra Otegi para que tome la decisión que corresponda en cuanto a su inhabilitación, el secretario general de Sortu evitó entrar en el cuerpo a cuerpo con la Fiscalía General.
En su primer acto político -tras asumir la ratificación por las bases de su candidatura a lehendakari por EH Bildu, como “un reto” para “construir una Euskal Herria independiente”- Otegi ha preferido hablar en Bilbao de la importancia de las próximas elecciones generales. El dirigente independentista hace pedagogía sobre la conveniencia de que la coalición independentista -que se hundió en los pasados comicios generales de diciembre- obtenga un gran resultado “porque se necesita un independentismo fuerte”. En ese momento de su intervención -en un acto trufado de preguntas y reflexiones que bajo el título 'escuchar para mejorar' llegaban desde el público, tuvo un recuerdo muy aplaudido al diputado Josu Muguruza, asesinado en Madrid tras ser elegido diputado por la entonces HB, en noviembre de 1989.
Ante una parroquia -llegó a bromear con el micrófono incorporado a su cuerpo que le hacía recordar más a un “telepredicador” que a un mitin al uso- que llenaba una de las salas del Euskalduna, presentó estas elecciones como una “primera vuelta de las elecciones autonómicas para ir mejor” situados a los comicios vascos y aseguró que solo se podrá dejar de ir al Congreso de los Diputados “cuando seamos mayoría en este país”, en alusión a los independentistas vascos.
Y para lograr ese “frente amplio” ha hecho un llamamiento a “ensanchar las bases de nuestro proyecto político” porque “EH Bildu no es la Izquierda Abertzale” y ha considerado posible que “pueden converger” en el proyecto de la coalición soberanista -en la que están partidos como EA, Aralar, Alternatiba y la propia Sortu- desde los comunistas hasta los socialdemócratas, pasando por los anarquistas o incluso llegó a citar a los cristianos de base. Fue la mayor novedad de su intervención en la que aseguró que EH Bildu no defiende un nacionalismo “trasnochado” y que también se pueden sumar a él “los que son, sencillamente, gente progresista en este país”.
“Repensar el independentismo”
Otegi ha ido más allá y ha abogado por “repensarlo todo”. “Este país necesita repensarlo todo, y digo todo, repensar el proyecto independentista, que no puede pivotar en exclusiva sobre el carácter identitario, necesitamos ofrecer a la gente un proyecto que les permita vivir mejor”.
Durante un acto celebrado en Bilbao un día después de que las bases de EH Bildu le ratificaran como candidato a lehendakari por la formación soberanista, el dirigente abertzale se ha comprometido a “construir otra Euskal Herria independiente”. Tras acoger “con alegría este desafío”, ha recordado que “este pueblo tiene varios retos en el aspecto nacional, social, del conflicto y sus consecuencias”.
Abundando en esa idea, ha subrayado que en EH Bildu “caben todos los que quieren luchar por la soberanía nacional” del país y “por un modelo social mucho más avanzado”. Ha apuntado, en la tradición más clásica de la izquierda abertzale, que la cuestión nacional y social son “dos caras de la misma moneda” y que el independentismo se tiene que entender “como el instrumento para crear los mecanismos de Estado que permita hacer un modelo social más justo y más avanzado”.
Además, ha defendido que la izquierda abertzale cree que “ser vasco es, sencillamente, vivir y trabajar en Euskal Herria y querer ser vasco”, y “amar este país” y ha rechazado los argumentos de “aquellos que dicen poco menos que son nacionalistas estrechos y trasnochados”.