Quiroga se hace 'asamblearia' para sacudirse el 'dedazo' de Basagoiti
El PP vasco quiere sacudirse las críticas que ha recibido en los últimos meses por lo que muchos consideran una sucesión vía 'dedazo' del anterior presidente, Antonio Basagoiti, sin que mediara un congreso. Arantza Quiroga, actual presidenta de los populares vascos, fue elegida antes de verano por unanimidad nueva líder en una reunión de la Junta Directiva regional. El método, recogido en los estatutos del partido, fue argumentado por la plana mayor del PP ante la salida inminente de Basagoiti de la política y su marcha a Mexico DF para dedicarse a la banca y también por la proximidad del verano.
“El congreso del PP vasco será, seguramente, en los primeros meses de 2014. Eso no está en cuestión, y será un congreso asambleario, al que pueda ir todo el mundo, que se apunte previamente en los plazos determinados por la dirección. Quiroga tiene la voluntad de que las bases hablen, ir a un congreso abierto, asambleario, respetuoso con nuestros estatutos” apunta un miembro del núcleo duro de los populares vascos.
Quiroga y el núcleo duro de su dirección -que no ha variado- siempre han explicado que si no ha cambiado el equipo ni tampoco se han modificado la hoja de ruta aprobada en las ponencias del último congreso, celebrado hacía poco más de un año cuando se produjo el cambio, no era fundamental pasar por un congreso. “Quiroga llega a la presidencia con el equipo que salió de un congreso hace un año, con el respaldo de todo el partido. Sería obligatorio un congreso si hubiera cambiado de dirección o de rumbo”, apunta un miembro del núcleo duro de los populares vascos.
Y también han señalado su voluntad de celebrarlo. Estatutariamente, la convocatoria oficial tiene que realizarse dos meses antes de la fecha elegida, por lo que la dirección se inclina por hacerlo ya a principios de 2014. “La militancia sabe que vamos a hacer un congreso. Las estructura nacionales, comarcales y locales han transmitido a la militancia que en los próximos meses se va a celebrar un congreso. No lo íbamos a celebrar en agosto, no tenía ningún sentido. Tenémos que organizar nuestros tiempos”, añaden las mismas fuentes.
“Enormes dificultades para hacer política”
La voluntad de la actual dirección es continuar por el camino emprendido en las ponencia aprobadas. “Ella [Quiroga] quiere reafirmar ese liderazgo escuchando a las bases. Lo vamos a hacer en el mejor momento para fortalecer la posición del partido. Y de proyecto político. Tenemos plena confianza en el respaldo que tenemos de nuestras bases”, admite.
El PP vasco sabe que el final de ETA sitúa al partido en otros parámetros y que en ese nuevo tiempo, tiene un recorrido que hacer, aprovechando un nuevo tiempo sin asesinatos. Pero también es consciente de que están hablando más a medio y largo plazo y que todavía van a tener “enormes dificultades para hacer política en Euskadi”. “El miedo no se va de la noche a la mañana, ETA no mata, pero el miedo a que te señalen fuera de las grandes ciudades, miedo de quienes se han disfrazado de nacionalistas para vivir más cómodo. Nos va a costar un trabajo enorme poder hacer política con normalidad”.