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Patxi López, el melómano que quiere poner la banda sonora al PSOE

Patxi López no descarta presentarse a las primarias del PSOE

Aitor Guenaga

Que el socialista vasco Patxi López (Portugalete, 1959) es un melómano empedernido es algo conocido por todo el mundo. La cuestión es si con el paso dado esta mañana de presentarse a las primarias que celebrará el PSOE en mayo para definir el liderazgo del partido el que fuera lehendakari entre 2009-2012 será capaz de dotar al partido de una nueva banda sonora que le permita sacar al socialismo español de su ensimismamiento y crisis de proyecto. Pero, sobre todo, con este movimiento Patxi López pretende hacer buena aquella máxima de “quien golpea primero, golpea dos veces”.

Patxi López tiene pedigrí en la familia socialista: es el hijo del histórico dirigente ugetista Eduardo López Albizu 'Lalo'. Ingresó en las Juventudes Socialistas en 1975 y en 1977 en el PSE. Una década después se haría con las riendas de la organización juvenil socialista en el País Vasco. Eran los tiempos del rock radical vasco y López bailaba entonces el Sarri Sarri de Kortatu, como él mismo llegó a confesar muchos años después. Por la casa del hijo de Lalo, en los tiempos duros de la dictadura, pasaron todos los que han construido el socialismo a la muerte del dictador: desde un luchador nato como Ramón Rubial, encarcelado durante muchos años por su oposición antifranquista, hasta el expresidente y exlíder socialista Felipe González, pasando por Joaquín Almunia y otros próceres del PSOE. Pero el PSOE del siglo XXI necesita algo más que una biografía sin tacha.

Patxi López tiene experiencia en la gestión pública y en el control de la vida interna del partido. Con él, el socialismo vasco alcanzó la Presidencia del Gobierno vasco, gracias a un acuerdo con los populares vascos y cuando la representación de la izquierda abertzale que se negaba a condenar el terrorismo de ETA estaba fuera del Parlamento. Eran los tiempos en los que su banda sonora política la ponía Bob Dylan con su famosa canción Knocking on Heaven´s Door adecuada para la ocasión: Llamando a las Puertas de Ajuria Enea, la sede de la Lehendakaritza en Euskadi.

Antes había logrado pacificar el partido en el País Vasco, después de una etapa final convulsa con su antecesor en el cargo, Nicolás Rendodo Terreros, que forzó un congreso extraordinario del que salió victorioso López. Ha sido el dirigente socialista que más tiempo ha estado liderando el PSE-EE: desde marzo de 2002 hasta septiembre de 2014, tras decidir cinco meses antes dar el salto a la escena nacional. Pero de él es la famosa frase pronunciada en un Comité Nacional de los socialistas vascos tras perder el poder de que “el viejo partido socialista se ha convertido en un partido viejo”. Y pese a ser conocedor de la crisis estructural que vivía su formación en Euskadi -que le ha llevado a tener ahora la misma representación que el PP vasco en las pasadas elecciones autonómica: nueve escaños- decidió poner la vista y sus ambiciones políticas en Madrid.

En junio de 2014 se echó a un lado

Y no le fue mal. Dos años antes de su salida de Euskadi, el entonces todopoderoso líder socialista Alfredo Pérez Rubalcaba le había hecho un sitio en su Ejecutiva como secretario de Relaciones Políticas. Su nombre sonó (y fuerte) en la etapa anterior a la presentación de los candidatos a las primarias para dirigir el PSOE que finalmente ganaría Pedro Sánchez, con el apoyo entonces de la lideresa andaluza, Susana Díaz. Pero tras compartir mesa y mantel con la presidenta de Andalucía optó en junio de 2014 por echarse a un lado y renunciar a competir por el liderazgo del partido. Para entonces Susana ya había colocado su dedo sobre su elegido: Pedro Sánchez, candidato que contó con el apoyo de López, en detrimento de su rival Eduardo Madina, otro socialista vasco en una etapa muy unido al lehendakari y con el que estuvo a punto de competir por el liderazgo del PSOE. Desde entonces, la relación entre ambos está en el congelador.

Pero, finalmente, prácticamente nada salió como la dirigente andaluza había previsto. Salvo para el propio López, que tras las primeras elecciones generales de diciembre se convertiría en la tercera máxima autoridad del Estado como presidente del Congreso de los Diputados. Fue en realidad un interregno. Y, desde entonces, el PSOE ha encadenado sucesivas derrotas que han sumido al partido en una crisis de proyecto y liderazgo a la que López pretende poner pie en pared. Y ya ha salido a la carretera. Patxi López está de gira.

Al exlehendakari, melómano sin remedio (la leyenda afirma que tiene unos 9.000 discos), Magical Mistery Tour no es la canción que más le gusta de ese disco de los Beatles. Le atrae mucho más The Fool on the hill, con su intensa flauta, tema del que tiene más de 25 versiones. En mayo de 2013, cuando se le preguntaba por esa canción y la posibilidad de iniciar un viaje para dar la batalla por el liderazgo en el PSOE traducía al castellano una de sus estrofas: “El viaje mágico y misterioso está esperándote para llevarte lejos...”.

La víspera de anunciar este mediodía en Madrid su móvil recibió un mensaje de 'WhatsApp' recordando esos tiempos y ese tour mágico que nunca llegó a sustanciarse definitivamente. López siguió el juego y respondió: “On the road again. ¡The new Magical mistery tour!” Y acompañaba el texto con tres emoticonos: un micro, una bicicleta y un par de jarras de cerveza.

Pero la pregunta, como diría la canción del grupo vasco Esne Beltza, es ¿Quién manda aquí?

O para ser más exactos. ¿Quién manda en el PSOE? O quién tendrá oportunidad de liderarlo tras este movimiento de Patxi López, que tal vez quiera desmentir -como antes hizo Francis Ford Coppola con su segunda entrega de la saga de 'El Padrino'- que segundas partes nunca fueron buenas.

Si la respuesta no está ya en el viento, ni las palabras parecen significar ya lo mismo para todos los militantes y dirigentes socialistas, igual hay que buscar el desenlace en los clásicos de la literatura.

-Cuando yo empleo una palabra -insistió Humpty Dumpty en tono desdeñoso- significa lo que yo quiero que signifique... ¡Ni más, ni menos!

-La cuestión está en saber -objetó Alicia, si usted puede conseguir que las palabras signifiquen tantas cosas diferentes.

-La cuestión está en saber -declaró Humpty Dumpty- quién manda aquí.

(Alicia a través del espejo, de Lewis Carroll)

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