El anteproyecto de la ley del aborto trata a las mujeres “poco menos que de locas”
La Sociedad Europea de Contracepción (European Society of Contraception and Reproductive Health (ESC), a la cual pertenece la Sociedad Española de Contracepción (SEC) ha mostrado su total desacuerdo con la pretensión de derogar la Ley de Salud Sexual y Reproductiva e Interrupción voluntaria del Embarazo. El Presidente de la ESC, el Dr. Johannes Bitzer, destaca que en España se pretende “una llamativa vuelta atrás de más de 30 años y criminalizar decisiones de las mujeres al tiempo que se las trata poco menos que de locas, al menos en el texto del anteproyecto de Ley que defiende el Gobierno”.
El doctor Bitzer, ginecólogo por la Universidad de Basilea, ha realizado estas declaraciones durante el XII Congreso de la Sociedad española de Contracepción, que se ha desarrollado en el Kursaal organizado por la Sociedad Vasca de Contracepción (SVC-EAE), acompañado de los doctores José Ramón Serrano, Presidente del Congreso y de la SVC, así como del Dr. Roberto Lertxundi, Vicepresidente del Congreso.
En este sentido, el facultativo ha sido tajante: “Deseo comentar, desde el punto de vista de la sociedad europea, la sorpresa que nos causó conocer la pretensión del gobierno español de cambiar la legislación sobre el aborto”. Hasta ahora, según el Dr. Bitzer, “España era un país que servía de ejemplo al resto de los estados europeos con respecto a la salud sexual y reproductiva de la mujer”, ha dicho. En este sentido ha añadido que “hemos comprobado que la historia reciente y los estudios científicos demuestran que toda legislación que suprime la libertad de elección de las mujeres, para decidir sí o no a un embarazo, son restricciones que van en contra de su salud, la empeoran y la causan graves problemas”.
No hay necesidad alguna de cambiar la ley
Por su parte el presidente de la Sociedad Vasca de Contracepción (SVC), José Ramón Serrano, defiende que “no hay ninguna necesidad de que en España se cambie una ley positiva para la mujer y la sociedad y que es un buen ejemplo”. Serrano abundó en el respaldo que la postura que Bitzer y la ESC mantienen en relación a la ley que el Gobierno de España pretende llevar adelante. “Es masivo el respaldo a la postura contraria al anteproyecto, no solo socialmente sino de forma especial desde las sociedades científicas, sanitarias y profesionales de España, resto de Europa y América, que en número de más de 125 apoyaron el reciente manifiesto de la SEC. ”Se ha provocado una gran sorpresa a nivel europeo, nuestros colegas se han llevado las manos a la cabeza cuando han conocido esta noticia“. En este sentido considera que ”no había hechos nuevos que invitaran a cambiar la ley en vigor y mucho menos una necesidad o polémica social. Nadie, en líneas generales, parecía reclamar un cambio. Por lo que advierto las razones elegidas para tgomar esta decisión son meramente ideológicas“.
El doctor Roberto Lertxundi defiende la actual ley de plazos, una fórmula “generalizada en Europa. Sólo en Malta, Irlanda, Polonia y Andorra no hay leyes que garanticen el aborto. Además es muy importante comprobar el listado de sociedades científicas que no admiten el anteproyecto y reclaman la pervivencia de la actual ley española”, ha explicado.
Graves problemas mentales
Por otro lado Bitzerse ha referido asimismo, a las consecuencias de la entrada en vigor de la ley Gallardón. “Ya hemos aprendido en otros países que el resultado es que las mujeres van a seguir tomando decisiones acudiendo a otros países y practicando abortos muy peligrosos. El riesgo es evidente y tendrá una grave repercusión en la mujer. Especialmente se verá afectada su salud mental porque con leyes como la que se propugna en España, la decisión de la mujer será criminalizada y en su mente causará un grave problema mental. Cuando hay quien traduce aborto por crimen el daño es muy alto”.
A su vez, el Dr. Serrano ha detallado el problema que se derivará para los profesionales, que “con la ley de 1985 ya estaban, siempre, en el candelero, los psiquiatras tenían que firmar, el ginecólogo que practicar el aborto, etc. Con la ley de 2010 se legaliza y libera la actitud de los profesionales, no hay un comité de ética, sino un comité científico que decide. Con el nuevo anteproyecto los psiquiatras están que trinan porque se les pone en un brete y no extraña que públicamente hayan rechazado la ley”, ha concluído.