“Hay que acabar con el componente especulativo de las subastas eléctricas”
La primera cooperativa española en producción y consumo de electricidad verde Som Energia se ha unido a la campaña “Desenchúfate de Garoña” impulsada por el Foro Anti Garoña. Juanjo Estévez, uno de sus socios, ha ofrecido en Vitoria-Gasteiz una charla junto a Aitor Hernández, de la cooperativa vasca GoiEner, para explicar los objetivos de estas iniciativas sin ánimo de lucro que apuestan por la energía verde.
La cooperativa Som Energia surgió en Cataluña para promover proyectos de electricidad limpia con el propósito de venderla al mercado. Ha construido ocho plantas solares fotovoltaicas, todas impulsadas con dinero de sus socios. Pero, al mismo tiempo, es una compañía comercializadora convencional, que da los servicios propios de una empresa eléctrica al comprar la energía al sistema eléctrico y entregarla a sus clientes. Ha alcanzado los 23.500 contratos de luz y ha pasado de 3.000 socios a 19.000 en los últimos tres años. Cataluña y Baleares concentran el mayor volumen de contratos pero se extienden por Aragón, Navarra, Madrid, la Rioja y Euskadi.
Juanjo Estévez, el socio 11004, ha explicado en la sesión informativa ofrecida en Vitoria-Gasteiz que las razones de la ciudadanía para hacer un cambio de comercializador pueden ser medioambientales, socioeconómicas o motivaciones originadas por un deseo de participar como consumidores de forma más activa. “Con el modelo vigente instaurado por el oligopolio de Iberdrola, Endesa y compañía todo queda hipotecado a unos intereses económicos empresariales muy concretos. Hay gente que quiere romper con esta dinámica impuesta y opta por la portabilidad a modelos alternativos de las pequeñas cooperativas eléctricas”, explica.
Balance cero entre el consumo y la comercialización
De hecho, según explica Estévez el objetivo de Som Energia no es vender energía sino caminar hacia un modelo diferente de consumo, más eficiente y sostenible. “Queremos cambiar la lógica con la que pensamos la energía porque esa lógica no solo debe ser de negocio y de mercado. Nuestro objetivo final es cambiar el modelo eléctrico capitalista y deshumanizado por otro democrático, basado en el ahorro y la eficiencia y la producción de energía renovable. Hay que acabar con el componente especulativo de las subastas eléctricas gracias al que la energía, a cada hora del día, tiene un precio distinto”, insiste Estévez. Por ello Som Energia apuesta por el balance cero entre el consumo y la generación.
Otro de los cambios que promueven estas cooperativas es la recuperación de las redes de distribución de la electricidad. “La red de distribución es el problema, por utilizarla pagamos y les estamos pagando a las empresas privadas una red construida con dinero público. En Alemania los ayuntamientos están recuperando esas redes, las están municipalizando. Sería otro de los objetivos con el tiempo, que las redes de distribución sean públicas”.
Según la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) el número de solicitudes de cambio de comercializador en el sector eléctrico durante el tercer trimestre de 2014 ascendió a 825.228, lo que supone una caída del 4,5% respecto al mismo período de 2013, mientras que en el sector gasista sumaron 199.399 solicitudes, un 0,8% más.
