Euskadi se echa a la calle para “no volver a la escuela del pupitre de madera”
Alumnos, familias, profesores y el conjunto de la ciudadanía. Todos están llamados a manifestarse hoy a partir de las cinco y media de la tarde por las calles de Bilbao para defender el actual sistema educativo y vasco y rechazar la Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE), también denominada 'Ley Wert'. Se trata de una convocatoria histórica, alentada por todos los agentes educativos que han dejado de lado sus diferencias ideológicas para echarse a la calle. Bajo el lema LOMCEri ez! Euskal Herrian gure hezkuntza eraiki (No a la LOMCE, en defensa de la educación de Euskal Herria), la comunidad educativa vasca quiere mostrar su rechazo a la 'Ley Wert' porque, en su opinión, supone un “regreso a la escuela del pupitre de madera”.
La Asociación de Madres y Padres de la Escuela Pública Vasca-EHIGE es una de las dinamizadoras de esta movilización. Su portavoz, Lurdes Imaz, asegura que la ley va a crear “ciudadanos de primera y de segunda” y recalca que los objetivos que persigue la LOMCE para reducir el fracaso escolar “no son signifgicativos” en el caso de Euskadi. “Como han reflejado multitud de evaluciones, la realidad de los centros educativos vascos es diferente a la del resto del Estado. Las tasas de abandono escolar temparno, el porcentaje de alumnado titulado en ESO, la alta satisfacción de las empresas y de inserción laboral de la FP, las tasas de titulados superiores.....son significativamente mejores”.
Por otra parte, los agentes educativos vascos se quejan de que la LOMCE no garantiza ni refuerza el euskera en el caso de la comunidad autónoma. “No considera al euskera como asignatura troncal, con lo que la convierte en una lengua de segundo grado a pesar de ser lengua cooficial”.
No a los exámenes de reválida
Además, muestran su discrepancia con el modelo educativo “segregador” que promueve la 'Ley Wert', que “clasifica y diferencia al alumnado a partir de los 14 años: dos títulos de graduado al terminar la ESO, oferta de áreas de primera segunda clase, itinerarios rígidos, oferta sin pasarelas”. La LOMCE no posibilita “la puesta en marcha de propuestas y planes para la mejora de resultados de todo el alumnado. De esta forma difícilmente se logrará desarrollar las competencias del siglo XXI, como la autonomía personal, adaptación a situaciones inciertas, ser emprendedor/a.
Otra de las críticas se refiere a la realización de exámenes de reválida al terminar la ESO y el Bachillerato y la introducción de controles en la Primaria. “Clasificar los centros en función de los resultados obtenidos y hacerlos públicos, orientar la labor profesional y de las escuelas hacia este único cometido, y adoptar medidas no concretadas para los centros que no alcancen unos determinados estandares, ¿hacia dónde nos dirige? ¿Dónde se sitúa la función de la escuela? ¿No se convierten la escuelas en una especie de academias?
