El conflicto asoma en Osakidetza
Los tambores de guerra empiezan a sonar en el Servicio Vasco de Salud. Los sindicatos rechazaron ayer la fórmula planteada por los responsables de Osakidetza para ampliar la jornada laboral de los trabajadores. El objetivo de Osakidetza es flexibilizar la aplicación del real decreto aprobado el año pasado por el Gobierno central, que obliga a aumentar las horas de trabajo de los funcionarios. Sin embargo, la fórmula que ha buscado no convence a los sindicatos y el conflicto ya asoma.
La ampliación de la jornada ha colmado la paciencia de los sindicatos, que aún siguen con el convenio de condiciones de trabajo de 2009, prorrogado año tras año. Aunque el Servicio Vasco de Salud ha dejado abierta la puerta de su despacho para seguir negociando, parece improbable que alguna central se acerque si no hay más cambios. La imagen de enfrentamiento quedó patente ayer durante la celebración de la mesa sectorial, foro en el que los seis sindicatos que lo integran (ELA, Enfermería, Sindicato Médico, UGT, CCOO, y LAB) mostraron su disconformidad con los planteamientos de los responsables sanitarios.
El real decreto obliga a todos los organismos públicos a ampliar la jornada de sus trabajadores en 22,5 horas al año, suprime los ‘canosos’ (días libres generados por la antigüedad) y reduce a la mitad (de seis a tres) las jornadas de libre disposición. En total, la plantilla tendrá que realizar 1.587 horas y 30 minutos al año. En un intento de flexibilizar este real decreto, Osakidetza, ha propuesto básicamente a los sindicatos que los trabajadores realicen media hora más al día hasta completar esas 22,5. Una solución, que según las centrales no resulta viable para buena parte de la plantilla, especialmente la que trabaja a turnos.
Agustín Gutiérrez, representante del Sindicato Médico en la mesa sectorial, asegura que hay muchos ejemplos de administraciones que están aplicando el real decreto de una manera beneficiosa para los trabajadores, con fórmulas de compensación. Gutiérrez pone los ejemplos de las diputaciones de Bizkaia y Gipuzkoa, Ayuntamiento de Bilbao y la Universidad del País Vasco (UPV). “Si hay que aplicar la ampliación de jornada debe hacerse de forma negociada y buscando acuerdos que beneficien a las dos partes”.
Similar nivel de empleo
Para Iñigo Garduño, el responsable del área de sanidad de Comisiones Obreras, la iniciativa de Osakidetza va a “precarizar” a la plantilla y va a suponer una “importante” reducción en el volumen de contrataciones temporales. Según los cálculos de los sindicatos, la aplicación del decreto supondrá aumentar la carga del conjunto de la plantilla (alrededor de 30.000 trabajadores) en 1,2 millones de horas al año. “Se van a perder muchos contratos”, resume
Mientras, ELA acusó directamente a Osakidetza de “manipular” en cuestiones como la creación empleo y de falta de talente negociador. “ELA no va a aceptar recortes e imposiciones. Por eso, nadie del Servicio Vasco de Salud nos va a llamar a reuniones bilaterales, como sí están haciendo con aquellos sindicatos que le han trasladado su posición favorable a acordar la aplicabilidad de los recortes”. En esta línea, apeló a los trabajadores de Osakidetza a que respondan “incrementando las acciones de protesta”.
Para Encarna de la Maza, responsable del Sindicato de Enfermería (SATSE), la propuesta del Servicio Vasco de Salud cruza las dos líneas rojas que su central había trazado: “No se buscan fórmulas de compensación para que la plantilla pueda conciliar la vida laboral y familiar teniendo en cuenta que se va a aumentar la jornada y se produce destrucción de empleo público. Sanidad está haciendo seguidismo del Gobierno central”.
Por su parte, el director de Recursos Humanos de Osakidetza, José María Armentia, considera que la oferta planteada junto con otras medidas va a permitir mantener “la oferta de empleo pública en cifras muy similares a la de años anteriores”.
Según Armentia, a lo largo de este año se van a crear 100 puestos de trabajo con la puesta en marcha de los nuevos centros de salud. Además, está prevista la creación hasta 2018 de alrededor de 1.600 nuevos puestos gracias a la aplicación de los contratos relevo. El director de Recursos Humanos abunda en que las vías de negociación se mantienen abiertas y confía en que la plantilla de Osakidetza se dee cuenta del paso “tan importante” que se ha dado para mejorar la aplicación del real decreto.
