¿Se pretende privatizar Euskotren?
Los trabajadores dedicados al mantenimiento de trenes de la sociedad pública de Euskotren no han sufrido ni un despido en la plantilla. Tampoco una merma en sus condiciones laborales pero de aquí a diciembre -de hecho ya se les puede ver repartiendo octavillas en estaciones y apeaderos- van a realizar una intensa campaña de movilizaciones. ¿Cuál es su lucha entonces? Quieren evitar desde ya una tendencia que perciben y les tiene muy inquietos: la “privatización” del mantenimiento de trenes.
Desde que Euskotren inició la renovación de la flota móvil ferroviaria, el mantenimiento de las nuevas unidades no corre a su cargo.
Según relatan los sindicalistas, la empresa introdujo a través de un concurso público para la compra de 30 nuevos trenes una cláusula mediante la cual derivaba el mantenimiento de los nuevos 'convoys' a la adjudicataria, en este caso la guipuzcoana CAF. El personal de esta compañía revisa y repara esos modelos. La plantilla no ha tocado ni uno de esos trenes. Ni lo hará hasta pasados varios años.
A principio de 2014 entraron otros 28 trenes procedentes de una nueva licitación otorgada a también a CAF. Darán servicio a la línea 3 del metro pero los trabajadores de los talleres de mantenimiento de Euskotren tampoco los repasarán ya que sus cuidados se han encomendado a una subcontrata de CAF.
Así que los empleados de Euskotren solo se ocupan de los trenes antiguos. De los 46 que revisaban se han retirado ya 15. Cada vez tienen menos carga de trabajo. Esta deriva les asusta. Va a suponer, a juicio del comité de trabajadores , la paulatina desaparición del desarrollo de esa actividad con personal propio. Su secretario, Unai Domínguez, compara la situación que vive la plantilla con una “muerte dulce”.
Ustedes denuncian un intento de la empresa de privatizar de forma paulatina el mantenimiento de los trenes ¿Cuándo percibieron esa intención por parte de Euskotren?
En el 2009 se empieza a renovar la flota y sacan un primer concurso de 27 unidades de tren de tres coches cada una. En octubre ese mismo el contrato sufrió una ampliación y paso a ser de 30 unidades de cuatro coches cada una. Un año después, en el 2010 nos enteramos, entre otras cosas, de que ese contrato de compra venía con un mantenimiento incluido acordado con CAF, la empresa licitadora.
Entre otras cosas, dice. ¿Qué más supieron que no sabían?
Es que también nos enteramos el pasado año que ese personal de CAF se encargaría del mantenimiento durante los cuatro años próximos a la última entrega de unidades, más posible prórroga de dos años más. Nosotros entendíamos que cada unidad tenía cuatro años de mantenimiento, independientemente de la fecha de entrega. Y es una matiz que cambia mucho el panorama. Con esta condición, ese servicio externalizado se puede alargar durante mucho tiempo, hasta febrero del 2018. Están encadenando contratos con CAF y da la sensación de que nuestro personal de mantenimiento no va a llegar nunca a reparar esas unidades.
Al tener conocimiento de esos detalles ¿cuál fue la reacción del comité?
Acordar de inmediato con la empresa la composición de la plantilla estructural. Lo pactamos en el 2010.
Un acuerdo que según ustedes no se está cumpliendo por parte de la empresa.
En ese acuerdo viene reflejada simplemente cual es la plantilla estructural: el personal, por categorías y talleres, técnicos de mantenimiento, eléctricos ...pero no pone esto tendrá que cumplirse a fecha tal. Simplemente las funciones de cada uno. pero es obvio que según se va jubilando gente o hay incapacidades de larga duración o acoplamientos del personal a otros puestos de trabajo, le empresa tiene que sacar esas vacantes a concurso oposición pero no lo está haciendo. la nueva directiva no está dando pasos para que esto se facilite. En las comunicaciones internas la empresa ni nos contesta las dudas que tenemos a cerca del futuro del personal o si lo hace, se limita a argumentar que las circunstancias han cambiado y que ya no puede llevar a termino ese acuerdo del 2010.
¿A qué circunstancias se refiere la empresa?
Una de ellas, aunque a nosotros no nos convence, es que los talleres de Durango se han trasladado a Lebario. En el acuerdo del 2010 viene reflejado el taller con residencia en Durango, que ahora no existe porque está en Lebario. La compra de las nuevas unidades implicaba las compra de nuevas infraestructuras más amplias y mejores. Las anteriores eran de los años 80 y tecnológicamente estaban obsoletas, no eran adecuadas. pero eso no es óbice para que cumplan el acuerdo. De hecho la plantilla de mantenimiento tendría incluso que crecer en número al tener ahora más trenes de los que teníamos.
¿Nunca han alegado falta de cualificación del personal para argumentar esa cesión del mantenimiento a otra empresa privada?
No. Nuestro personal está cualificado pero nos tendrán que dar una formación orientada a las nuevas unidades. Es el plan de formación del que habla la empresa pero que no llega nunca y que nosotros hemos solicitado en muchas ocasiones, porque cuando se acabe el plazo estipulado con CAF para el mantenimiento de las nuevas unidades, se entiende y así lo esperamos que seremos nosotros los que nos ocuparemos de esos trenes.
¿Qué esperán del Gobierno vasco?
El mantenimiento integral tiene que llevarse desde dentro de la empresa. Existe una clara externalización del trabajo en favor de la empresa privada. Desde le momento en que Euskotren permite a CAF en instalaciones públicas con su personal llevar el mantenimiento de los trenes hay una clara merma de recursos públicos en favor de los privados. Y ni siquiera es CAF quien lleva ese mantenimiento sino que lo subcontrata a otra tercera empresa. El personal de Euskotren tiene unas condiciones que viene reflejadas en el convenio, CAF tiene otras recogidas en su convenio pero el mantenimiento lo hace una subcontrata que está con el convenio del metal. Con dinero público se está permitiendo que haya trabajadores haciendo una actividad bajo un convenio que no les corresponde obviamente en condiciones mucho peores que cualquiera de las otras dos empresas. El contrato ahora ya no no se puede romper pero el Gobierno debe asegurar a sus trabajadores que una vez acabado serán ellos quienes se encarguen de esas tareas no sin antes haber recibido un curso de formación.
Repeten movilizaciones cada quince días. ¿Cómo les acoge la ciudadanía cuando salen a la calle a denunciar susituación? ¿Es difícil en tiempo de tanta precariedad llegar a la gente, cuando en vuestro caso, la denuncia no es por despidos?
Lo entiendo, pero nosotros defendemos el empleo público y es algo que afecta a todos. La ciudadanía no es tonta y ven que se derivan recursos públicos de todos los ciudadanos en favor de la empresa privada.
¿La plantilla está entonces concienciada?
Sí, sin duda. No se dan despidos, pero tampoco se renuevan contratos eventuales, ni uno desde antes del verano. Hay una carencia de unas 15 plazas estructurales aproximadamente y hasta antes de el pasado verano en el taller de Lebario se cubrían cinco plazas con eventuales de una bolsa de trabajo creada en el 2011. No se han renovado estas contrataciones y esos chavales están en la calle cuando se veían, en un futuro, con plaza. Esto sumado a que no vamos a tocar en mucho tiempo los nuevos trenes nos coloca en una situación de incertidumbre. Además la empresa no nos facilita explicaciones ni aclaraciones convincentes y este desconocimiento nos asusta. Sentimos que estamos ante una muerte dulce.