El exdirector de Agricultura del Gobierno vasco, imputado por apropiación indebida
La juez de Balmaseda Patricia Navas ha citado a declarar en calidad de investigados (la nueva denominación procesal para los imputados) a un total de 11 personas más en la causa penal abierta por las irregularidades económicas en la construcción de una planta de Purines en el valle de Carranza (Bizkaia), un proyecto inacabado que se ha tragado del orden de 10 millones de euros en subvenciones públicas estatales, autonómicas y locales. Entre los citados, a los que se les acusa inicialmente de “apropiación indebida, falsificación de documentos públicos y malversación”, se halla Martín Ascacibar, el impulsor de esta planta primero como director de Agricultura del Gobierno vasco y comisionado “exclusivo” del Ejecutivo para el seguimiento del proyecto y después como consejero delegado de la sociedad detrás del plan, Karrantzako Minda; el exalcalde de Carranza, José Luis Portillo, y el exedil de la localidad José Ignacio Muro, todos ellos del PNV.
El proyecto de construcción de una planta para el tratamiento de purines animales en Bizkaia se ideó en 2003 y se empezó a desarrollar en 2006, con Ascacibar como director en el Departamento de Agricultura que dirigía el nacionalista Gonzalo Sáenz de Samaniego. Ascacibar se convirtió en representante “exclusivo” del Gobierno en la comisión de seguimiento de este plan.
Ya en enero de 2006 entró en la Administración vasca una solicitud de ayudas económicas remitida por la entidad Karrantzako Minda. Con apenas 3.000 euros de inversión y con un formulario en blanco, la entidad promotora de la infraestructura se llevó una subvención millonaria de la oficina de Ascacibar. En 2008, Euskadi también otorgó subvenciones nominativas (directas) a Karrantzako Minda sin que hubiera gastos justificados. El Estado también fue generoso con este proyecto como lo fue en la misma época (con José Luis Rodríguez Zapatero en minoría) con otras sueños rotos impulsados por el PNV como el equipo vasco de Fórmula 1 (Epsilon-Euskadi) o el coche eléctrico Hiriko, que unidos se han llevado por delante unos 50 millones de euros públicos.
En 2009, el PSE-EE llegó al Gobierno vasco y Ascacibar cesó en Agricultura en julio. Once días después de abandonar el Ejecutivo, el exdirector pasó a ser consejero delegado de Karrantzako Minda. Ya antes, desde 2007, había sido parte de la mercantil Ade Biotec, encargada de las obras y socio principal de Karrantzako Minda.
Ascacibar será el primero de los once imputados en declarar y lo hará el 3 de mayo. Ese día están citados otros miembros del consejo de Karrantzako Minda como Ángel María Ruiz Quintano, Manuel Fisure, Vicente Albisua y dos excargos del Ayuntamiento local, el que fuera alcalde, José Luis Portillo, y el exedil José Ignacio Muro, ambos del PNV. Para una segunda jornada de interrogatorios quedarán Mikel Aingeru Ibarrondo –el que firmó la participación de Ade Biotec en el proyecto-, Alfredo González, Xabier Aguiriano, María López Claudios y el abogado Emiliano Garayar, que ya estuvo imputado en la causa abierta en Cantabria por la venta del Racing de Santander.
Mientras avanza la causa penal, está pendiente de resolución la causa mercantil. En octubre del pasado año se celebró el juicio en Bilbao y aún no se conoce la sentencia de la magistrada, que habrá de determinar si fue culposo el concurso de acreedores de Karrantzako Minda. Si es así, Ascacíbar y otros responsables del proyecto tendrán que reintegrar a los acreedores, principalmente entidades públicas, el dinero recibido. Así lo han exigido la Fiscalía, la Abogacía del Estado, el Ayuntamiento y la administración concursal.
