Un acuerdo político “a cuatro” dejará al PP fuera de la Mesa del Parlamento Vasco por primera vez desde 1990
PNV, EH Bildu, Elkarrekin Podemos y PSE-EE ultiman un primer gran acuerdo político para abrir la undécima legislatura vasca el próximo viernes con el reparto de la presidencia y los cuatro asientos de la Mesa del Parlamento Vasco, el órgano que dirige la institución con importantes atribuciones. A falta de cerrar los flecos y, sobre todo, los nombres definitivos de las cuatro personas que acompañarán a la ‘jeltzale’ Bakartxo Tejeria en su segunda legislatura al frente de la Cámara, está decidido que el PNV contará con dos puestos y que el PP se quedará definitivamente fuera a pesar de las protestas lanzadas hasta este lunes por su jefe de filas, Alfonso Alonso. “No se nos pueden cerrar las puertas desde el principio. No tiene ningún sentido la exclusión del PP”, se ha quejado Alonso en su primera rueda de prensa como parlamentario vasco.
“Será un acuerdo a cuatro”, confirman a eldiarionorte.es varias fuentes conocedoras de la negociación en los pasillos del Parlamento. La presidencia, no cabe duda, recaerá en el PNV, que volverá a presentar al cargo a Tejeria. A partir de ahí, en el primer pleno de la legislatura, que se ha fijado para este viernes 21 de octubre, se realizarán dos votaciones separadas para ocupar las dos vicepresidencias y las dos secretarías. EH Bildu, como segunda fuerza, accederá a una vicepresidencia y el PNV aspira a que Iñigo Iturrate, su hombre fuerte en el Parlamento, repita como secretario. Así, la única incógnita que falta por despejar es si el PSE-EE, a pesar de ser cuarta fuerza, podrá contar con la segunda vicepresidencia en detrimento de Elkarrekin Podemos.
Se trata de una cuestión más simbólica que política para los socialistas, entre otras cosas porque el PSE-EE nunca ha perdido el despacho de vicepresidencia de la segunda planta desde que Jesús Eguiguren lo ocupara allá por 1990. Para que se mantengan ahí, el PNV debería prestarle sus votos a los socialistas, aunque se trata de un movimiento natural si finalmente ambas formaciones avanzan hacia una coalición de Gobierno. Las conversaciones se retomarán con fuerza esta semana, aunque formalmente el PNV no ha excluido aún a EH Bildu como socio.
Alonso se despide del Congreso
El PP de Alonso, que hoy ha entregado sus credenciales y se ha registrado como parlamentario junto a sus ocho compañeros al tiempo que ha renunciado a su condición de diputado en el Congreso (será relevado por Javier Maroto), parece tener asumido que quedará fuera de la Mesa. El líder de los ‘populares’, aunque ha dicho que ahora no es momento de “advertencias” y sí de apurar los plazos para poder influir en una negociación en la que están fuera, ha resaltado que en la Cámara “no hay mayorías” –en referencia a la posible suma de PNV y PSE-EE- y que la legislatura es “larga” como para que un hipotético Gobierno de coalición requiera en algún momento del apoyo externo del PP. Ha llegado a afirmar que los nacionalistas no estarían actuando con “inteligencia” con este movimiento político a cuatro bandas y no a cinco.
Alonso también ha recordado la “apertura” que mostró su partido en el Senado al ceder hace sólo unos meses un puesto en la Mesa de la Cámara alta a los nacionalistas, una formación minoritaria. De hecho, ni siquiera Unidos Podemos y Ciudadanos forman parte de ese órgano en el que sólo están PP, PSOE y PNV.
Aunque nunca sale a relucir en los discursos públicos, tanto aquella decisión en el Senado como ahora los movimientos en el Parlamento autonómico tienen un trasfondo económico en forma de más asignación para los grupos con presencia en la Mesa y más posibilidad de contratar asesores. En el caso vasco, cada miembro de la Mesa tiene derecho a contratar a dos asistentes (o tres con dos medias jornadas, como ha sido el caso de los 'populares').
Alonso ha apelado a la historia de la Cámara vasca para demostrar que la “pluralidad” en la Mesa ha sido la tónica dominante. Y es cierto, aunque diez legislaturas han dado para todo tipo de combinaciones. Al principio, el PNV, como fuerza mayoritaria, copaba hasta tres de las cinco plazas al beneficiarse de un sistema de elección en tres votaciones separadas, presidencia, vicepresidencias y secretarías. Pero en 1986, con el PSE-EE como primera fuerza y EA ya en liza sí se optó por una mesa con cinco partidos, situación que se ha repetido en el tiempo en otros momentos. Los acuerdos, sin embargo, borraron en 2005 a EHAK (9 escaños, los mismos que el PP ahora) para beneficiar al socio del PNV, la Ezker Batua de Javier Madrazo. Y en 2009 y 2012, como ocurrirá ahora, el PNV asumió dos plazas en la Mesa aun cuando había más grupos en el legislativo, como Aralar en 2009 (4 escaños) y UPyD en 2012.
Lo que sí es cierto es que el PP siempre ha tenido un representante en la Mesa desde su estreno en 1990 (antes se presentó como AP o CP). Su voz fue Carmelo Barrio desde 1990 a 2009, ininterrumpidamente. Le siguió como presidenta Arantza Quiroga entre 2009 y 2012 y en la última legislatura Antón Damborenea ha tenido una plaza de secretario.
Sin Senado para Elkarrekin Podemos
En paralelo, los grupos deberán determinar también el reparto de los tres escaños en el Senado que puede designar el Parlamento Vasco, hasta ahora en manos de PNV (Jokin Bildarratz), EH Bildu (Iñaki Goioaga) y PSE-EE (Tontxu Rodríguez). Algunas fuentes dan por seguro que los socialistas, potenciales socios de Gobierno del PNV, lograrán de nuevo el apoyo nacionalista para retener ese escaño (que no es decisivo porque el PP tiene mayoría absoluta) en perjuicio de Elkarrekin Podemos, tercera fuerza en votos y en escaños. No obstante, estas conversaciones pueden demorarse bastante más tiempo, ya que esta cuestión se resolverá en diciembre, en el primer pleno ordinario de la legislatura después de la sesión de investidura del lehendakari.
Lo que no podrá evitar el menguado PSE-EE de Idoia Mendia (pasa de 16 a solamente 9 escaños) es que la coalición de Podemos, IU y Equo ocupe su bancada en el hemiciclo de la Cámara. Según una propuesta de Elkarrekin Podemos difundida por 'El Mundo', la intención del grupo de Pilar Zabala es ocupar la parte izquierda de la bancada central, lo que obligaría a los socialistas a sentarse a la derecha de ese sector, junto al PNV, aunque la nueva ubicación tendría lógica de confirmarse un Ejecutivo compartido.
En todo caso, Elkarrekin Podemos tendrá todo el Parlamento libre el próximo viernes para elegir dónde se ubicarán. Incluso podrían 'robarle' el escaño al lehendakari, Iñigo Urkullu. La sesión constitutiva se inicia con un llamamiento a los 75 electos por riguroso orden de acreditación y los primeros en solventar ese trámite fueron precisamente los aforados de Podemos, IU y Equo. Después lo hizo todo el PNV menos Arantxa Tapia (de viaje oficial como consejera en funciones) y gran parte de EH Bildu (el resto lo han formalizado después). Con el PP este lunes, sólo faltan los socialistas para completar la nueva Cámara vasca de la undécima legislatura.