Una singularidad vasca: los sueldos galácticos de algunos alcaldes
25 de junio. Primer pleno municipal de la nueva legislatura en el ayuntamiento vizcaíno de Arrigorriaga. Y entre las primeras decisiones, el alcalde Asier Albizua, del PNV se sube el sueldo un 44 %, pasando de los 45.135 euros brutos anuales que percibió durante el mandato anterior a los 65.509 euros actuales. La localidad de Arrigorriaga (de 12.500 habitantes) vive con tensión esta decisión y varios vecinos increpan con dureza al regidor con gritos de “chorizo”, “ladrón” y “sinvergüenza”. Con la ley en la mano, la decisión de Albizua es perfectamente legal y se ajusta a la normativa establecida por la Asociación de Municipios Vascos-Eudel. Otra cosa es que esa decisión sea más o menos aceptable en un momento como el actual. A las singularidades propias que aúna Euskadi frente al resto de comunidades gracias al Concierto Económico, ahora se suma una más y es la posibilidad de ‘burlar’ la ley que regula el funcionamiento de los ayuntamientos de España en cuanto a los salarios de los alcaldes y establecer otros diferentes, que en algunos casos pueden llegar a ser ‘galácticos’ si se comparan con los de regidores de otras localidades españolas con la misma población.
El caso es que la ley que regula el funcionamiento de los ayuntamientos de España establece un tope de 50.000 euros brutos anuales para los alcaldes de municipios de entre 10.000 y 20.000 habitantes, una cantidad que equivale al 50% del sueldo de un secretario de Estado. Sin embargo, en Euskadi las directrices de Eudel, que han sido recogidas en normas forales que han aprobado los territorios de Álava, Bizkaia y Gipuzkoa, fijan una retribución equivalente a la de un director del Gobierno vasco (es decir, 67.087 euros brutos anuales) para los alcaldes con dedicación exclusiva en los ayuntamientos de más de 10.001 y hasta 20.000 habitantes. Y es a esta especificidad a la que se han ido acogiendo varios alcaldes para mejorar de manera ostensible sus nóminas. Son normas sobre la “singularidad foral en la aplicación de las medidas de racionalización y sostenibilidad” que rige en el resto del Estado, se justifican los regidores.
Eudel estableció a comienzos de año los límites salariales según un baremo común que tiene en cuenta el número de habitantes que cada localidad. Y consensuó con las diputaciones las nuevas reglas. Los límites quedaron de de 50.315 euros anuales para los pueblos más pequeños (aquellos de menos de 2.000 vecinos) a los 90.000 para las capitales de los tres territorios históricos. La clasificación quedó de la siguiente forma:
Localidades con menos de 2.000 habitantes: 50.315 euros.
Localidades de 2.000 a 5.000 habitantes: un sueldo tope de 57.023 euros
Municipios de 5.000 a 10.000 vecinos: no pueden sobrepasar los 60.378 euros anuales.
Localidades de 10.001 y hasta 20.000 habitantes: 67.087 euros brutos anuales.
Para los municipios de 20.000 a 50.000 habitantes: 73.890 euros
Subida a la primera de cambio
Subida a la primera de cambioLos alcaldes de Arrigorriaga, Beasain y Azkoitia, todos del PNV, se han subido su sueldo hasta el límite máximo que les permite esta ‘singularidad’ vasca en la primera oportunidad que han tenido. Así, cobrarán algo más de 65.000 euros brutos anuales cada uno, muy por encima de los 50.000 euros que establece la Ley española de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local para los municipios de menos de 20.000 habitantes, aprobada en 2013 con los votos del PP y el apoyo del PNV en el Congreso.
Pero frente a estos ejemplos, el alcalde de Etxebarri, Loren Oliva (La Voz del Pueblo), va a cobrar un 10% menos esta legislatura, con lo que pasará a percibir 2.700 euros netos al mes. Se trata de la segunda reducción del salario del regidor (que ya rebajó su sueldo la anterior legislatura). Etxebarri tiene 10.337 habitantes, es decir que con la ‘ley vasca’ en la mano podría seguir el camino de sus colegas de Arrigorriaga, Beasain y Azkoitia y subirse el sueldo, pero ha optado por el camino contrario.
También hay concejales que incluso han dimitido en desacuerdo con las subidas de sueldo del equipo de gobierno municipal. Es el caso del concejal de PNV en Pasaia, Erik Rios, quien ha dimitido como concejal de este municipio al no compartir la subida de un 35% en los sueldos del equipo de gobierno aprobada por el pleno municipal con los votos de su partido y el PSE. Ambos partidos gobiernan en coalición el municipio, dirigido por la socialista Izaskun Gómez.
Y también hay alcaldes que han optado por pegar su nómina en todos los portales del pueblo para que todos los vecinos sepan lo que gana. Es lo que ha ocurrido en la localidad de Abadiño (Bizkaia). José Luis Navarro, quien cobra 2.796 euros al mes, se presentó como cabeza de una lista independiente y resultó elegido en los pasados comicios municipales.