“Cerramos 2015 con 56 zorras muertas. Prometemos que 2016 será un baño de sangre”
Desde 2013, la Fiscalía clasifica separadamente los delitos contra la igualdad y los casos de discriminación. En la memoria del ministerio público de 2017, relativa a la estadística de criminalidad de 2016, se recogen casos muy graves en esta categoría, como la investigación abierta en un juzgado de Bilbao, apoyada por la unidad de delitos informáticos de la Ertzaintza, para identificar al titular de una cuenta de Twitter que, entre otros, lanzó el siguiente mensaje sobre las mujeres y la violencia de género: “Cerramos el año [2015] con 56 zorras muertas. Y prometemos que el año 2016 tendrá un baño de sangre. Mucho ánimo con ellas”.
La investigación mostró que desde esa cuenta de Twitter, que contaba 700 seguidores, se profirieron un total de 18 mensajes de esa naturaleza. El juzgado reclamó a la red social datos sobre esa cuenta y, al cierre de la memoria, aún se estaba a la espera de recibir la contestación oficial para proceder contra esta persona.
También en Bizkaia se registró otro caso de gravedad, en este caso de xenofobia, racismo y aporofobia. Un ciudadano de Nigeria se hallaba en la puerta de un supermercado pidiendo ayuda económica cuando una persona se le acercó y le agredió después de proferir distintas frases insultantes y amenazas.
Otro episodio llamativo, en esta ocasión de “acoso inmobiliario”, ocurrió en La Arboleda. Según constató la investigación, la asociación de vecinos llevó a cabo actos de “hostigamiento, concentraciones y colocación de pancartas” con tal de impedir que una familia de etnia gitana ocupase una vivienda que le había adjudicado el Gobierno vasco. El presidente de la asociación fue imputado y condenado por estos hechos.
En Álava, finalmente, la Fiscalía no pudo completar una investigación en torno al ataque con sangre de cerdo y pintadas contra el local de Zabalgana, en Vitoria, que iba a acoger la nueva mezquita del barrio. También se distribuyeron octavillas contra la apertura del templo. La memoria reseña que no pudo identificar a los autores de los hechos y que “tales acciones islamófobas se finalizaron sin mayores incidentes”.
