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Los “desaciertos” que Vera olvidó reconocer en su balance de legislatura

La consejera navarra de Salud, Marta Vera.

Celia Bustamante

La consejera de Salud reconoce al término de la legislatura que su gestión ha estado marcada por aciertos y desaciertos, asegurando haber cumplido los compromisos que adoptó para este periodo de gobierno y dejar la sanidad en los mismos puestos de valoración que estabaMarta Vera reconoce haber cometido errores, en palabras de la propia consejera: “es obvio que con algunas personas me equivoqué”, en referencia al último gerente del Servicio Navarro de Salud, Juan José Rubio. El otro desacierto que reconoce Marta Vera es que los sindicatos no hayan querido negociar ciertas cuestiones y no haber llegado a acuerdos porque “para conseguirlo quien se sienta en la mesa tiene que tener voluntad de consensuar”. Cuatro años de gestión en los que el Parlamento ha pedido su dimisión en varias ocasiones.

Los errores que reconoce la consejera dependen directamente de terceras personas, pero no ha hecho ninguna mención a cuestiones como haber mantenido plantas del hospital cerradas pese a haber necesidad de camas, la gestión del plan de infraestructuras sanitarias criticado por Comptos o la facturación a inmigrantes pese a contar con una ley que garantizaba la asistencia sanitaria universal y gratuita. Estos son algunos de los asuntos que han marcado la polémica en la gestión de salud de la legislatura y los siguientes, los más criticados por la oposición por los profesionales del sector.

Privatización de las cocinas

Durante el mandato de Marta Vera se privatizaron las cocinas del Complejo Hospitalario. Una decisión que acarreó numerosas quejas por los usuarios y sanciones a la propia empresa debido a la baja calidad de la comida, en la que se llegaron a encontrar restos fecales. Una decisión que tampoco tuvo su impacto en las arcas públicas ya que un informe de Comptos asegura que la privatización no supuso un ahorro, sino todo lo contrario.

Nuevas Urgencias

En octubre se puso en marcha el nuevo servicio de Urgencias y desde entonces, los trabajadores no han parado de denunciar sus carencias. Desde la dirección, y la propia consejera aseguran que los tiempos de espera han mejorado, algo que niegan los profesionales que además critican la falta de personal, de material y de espacio, que ha quedado demostrado con la orden de utilizar los pasillos como zonas para colocar camillas en caso de saturación del servicio.

Laboratorio unificado

El laboratorio unificado ha sido otra de las cuestiones polémicas del mandato de Vera. Fallos en la cadena de análisis que han conllevado retrasos en las analíticas e, incluso, rotura y caducidad de muestras debido a los problemas en la nueva ubicación. Una unificación que se ha quedado a medias ya que la presión social ha obligado a Vera a paralizar el traslado de la actividad de los laboratorios del Reina Sofía de Tudela y García Orcoyen de Estella al considerar que iba a suponer una merma en la calidad del servicio.

Urgencias rurales

El acuerdo para las urgencias rurales ha sido otro de los desaciertos de la consejera según los profesionales. Un acuerdo firmado con varios sindicatos que no ostentan la mayoría en sanidad y que, según los profesionales, no ha servido para mejorar las condiciones de trabajo que tenían ni ha supuesto el ahorro que, en principio, se iba a conseguir. Un acuerdo que debía ser un Plan del departamento y que fue cuestionado por los servicios jurídicos del Parlamento y por el Defensor del Pueblo.

Ébola

La gestión con los posibles casos de Ébola que han llegado a la Comunidad foral así como la formación de los profesionales ha sido otra polémica durante el mandato de Vera. La falta de material (proporcionaron a los profesionales kits de protección de la gripa A), la falta de formación y la poca eficacia de los primeros protocolos establecidos pusieron en alerta al sector que solicitó más formación y prevención tras el contagio de una auxiliar de enfermería en Madrid.

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