Piedras de papel es un blog en el que un grupo de sociólogos y politólogos tratamos de dar una visión rigurosa sobre las cuestiones de actualidad. Nuestras herramientas son el análisis de datos, los hechos contrastados y los argumentos abiertos a la crítica.
El primer año de gobierno de Rajoy no solo ha sido el de mayor número de protestas conocido en la historia reciente, sino que, más que nunca, las movilizaciones se han convocado contra decisiones políticas y legislativas. Esto, a Aznar, no le pasaba.
Durante el año 2012, el primero del gobierno del PP, se convocaron en España 44.233 manifestaciones, de acuerdo con el último Anuario Estadístico del Ministerio del Interior publicado hace unos meses. ¿Son muchas o pocas manifestaciones? Cada uno tendrá su opinión, pero el gráfico que adjunto es incontestable y merece comentario. Por un lado, a medida que golpea la crisis, aumentan el número de manifestaciones. Así, mientras en 2008 no se superan las 10.000 protestas, los tres últimos años del gobierno socialista de José Luis Rodríguez Zapatero se duplicaron llegando a las 20.000 anuales. Pero lo que realmente destaca es el desempeño del primer año de gobierno conservador. El periodo de gobierno de Rajoy ha batido todos los récords: durante su primer año de mandato el número de manifestaciones y protestas estuvo por encima de 44.000, una marca considerable.
*No he encontrado los datos para 2002.
¿Por qué se manifiestan los españoles? En 2012 los motivos fueron muchos, pero en un 34 % de las ocasiones fueron por asuntos laborales, seguido de un 22 % contra medidas políticas y legislativas -básicamente, contra las decisiones del gobierno central y autonómico - , y un 10 % por motivos vecinales. ¿Han variado las razones por las que se manifiestan los españoles? Sí, como indica el gráfico, en 2000 solo un 2,4% de las protestas se referían a políticas y medidas legislativas; un 31 % de las manifestaciones fueron por asuntos laborales (la única coincidencia con 2012), seguidas de las de apoyo a ETA y los presos (18.4 %), y los temas vecinales (10,7 %). La comparación con el año 2000 es adecuada por ser el primero de mayoría absoluta de José María Aznar. En ese año hubo 12.298 manifestaciones, de acuerdo con los datos del anuario del Ministerio para ese año, es decir, un poco más de una por cada cuatro manifestaciones habidas en 2012.
Por una parte, hay que destacar esta diferencia: mientras que en 2000 los ciudadanos apenas se manifestaron contra las decisiones del gobierno o su legislación, en 2012 se salió a la calle para rechazar las medidas tomadas por el ejecutivo de Rajoy. Una posible interpretación (no la única) de estas cifras es que, a los ojos de muchos ciudadanos, el gobierno de Rajoy se equivoca y, a juzgar por los números, se equivoca mucho más que los anteriores.
Por otra parte, si suponemos que, excepto en algunos casos, los ciudadanos prefieren hacer otras cosas antes que asistir a una manifestación (no parece este un supuesto heroico), la pregunta es por qué salen más a la calle los españoles ahora que antes. No tengo una respuesta clara ni definitiva. Seguramente, será una combinación de varios factores. Una posibilidad es que, después de darle una mayoría abrumadora al PP, los españoles se hayan radicalizado. Pero Sandra León en este mismo blog mostró que no era así. Una segunda posibilidad es que a la calle salgan siempre los mismos lo que implicaría que se manifiestan el doble que con Zapatero y el cuádruple que con Aznar (ahí es nada). Esto sólo podría suceder si esos ciudadanos tienen el don de la ubicuidad o si dedican toda su actividad diaria a asistir a las distintas manifestaciones que se celebran. La tercera es que la duración de la crisis, el deterioro institucional y las medidas del gobierno han reducido los costes individuales de manifestación: ahora hay ciudadanos (también votantes del PP) que antes no se manifestaban pero que se manifiestan para expresar su frustración.
Termino con una reflexión. Durante estos últimos años en los que han aumentado las manifestaciones, la gran mayoría de ellas (por encima del 99%) han terminado sin altercados o incidentes. Es más, tampoco las manifestaciones no comunicadas han generado problema alguno. Si desde 2009 se han celebrado más de 100.000 manifestaciones en España y, en la gran mayoría de los casos, no ha habido problemas, esto es algo que merece destacarse positivamente. Sin embargo, el Ministro del Interior (sobre cuya labor ya hemos hablado aquí) y el gobierno, quieren cambiar la ley que, “permitirá que queden mejor afianzados los derechos y libertades públicos, garantizando mejor la seguridad ciudadana e impidiendo la aparición de conductas ilegales, violentas y vandálicas”, en lo que se conoce como ley de seguridad ciudadana. ¿Responde la ley a cuestiones ideológicas o a hechos objetivos? En lo que a las manifestaciones se refiere, el gobierno no quiere que la realidad le estropee su visión del mundo.
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