Abogados chinos se movilizan contra el Gobierno tras conocerse torturas

El colectivo de abogados de derechos humanos de China se ha movilizado para pedir responsabilidades al Gobierno después de que uno de sus compañeros, Xie Yang, denunciara haber sufrido graves torturas de la policía, confirmaron hoy desde China Human Rights Lawyers Concern Group (CHRLCG).

Hasta ahora, 74 letrados han acordado ayudar a interponer una denuncia contra las autoridades supuestamente responsables de los abusos sufridos por Xie, detenido el 11 de julio de 2015 y aún hoy a la espera de juicio, confirmó a Efe la directora ejecutiva de CHRLCG, Kit Chan.

La mujer de Xie fue quien buscó ayuda del colectivo después de conocerse el maltrato a Xie, y ayer fue “acosada” por la policía para que abandonara su propósito, añadió Chan.

Antes de ser arrestado oficialmente, Xie pasó seis meses en una ubicación secreta, sin poder hablar con un letrado o sus familiares, víctima de torturas psicológicas y físicas, según denuncia ahora a través de los abogados que han podido verle.

La página web chinachange.org, que trata asuntos de derechos humanos, está publicando los extractos de la conversación mantenida entre Xie y los letrados, en la que éste explica detalladamente los abusos y proporciona nombres de agentes supuestamente implicados.

Aunque haya habido denuncias similares en el pasado, el relato de Xie es “único” en cuanto a la información que ofrece, considera Chan.

“Es casi la primera vez que vemos un testimonio tan completo”, remarca en declaraciones a Efe.

Xie habla de un maltrato sin límites en una ubicación que sólo conocen los agentes y en la que no hay controles, ni manera de escapar si no es a través de una confesión.

Por turnos, Xie era vigilado las veinticuatro horas del día privándole del sueño o del acceso a agua por largos periodos de tiempo, sufriendo palizas y amenazas contra su mujer o su hija.

Según relata, durante días le interrogaban manteniéndole más de veinte horas sentado en una “silla colgante”, una especie de taburete de plástico en el que sus pies quedaban colgando y donde debía permanecer recto.

“Si te mueves, consideraremos que nos estás atacando y haremos todo lo necesario para reducirte”, le advertían a Xie, al que pedían que confesara haber cometido un delito por la fama, el dinero o para oponerse al gobernante Partido Comunista y el socialismo.

En opinión de CHRLCG, el testimonio de Xie confirma “las preocupaciones” que las ONG habían manifestado desde que cientos de abogados de derechos humanos fueran arrestados, interrogados o “desaparecieran” (como ocurrió durante seis meses con Xie) en la campaña oficial contra este colectivo iniciada en 2015.

Algunos de ellos han aparecido en medios de comunicación confesando su supuestos crímenes, en declaraciones que múltiples ONG consideraban “forzadas”.

El relato de Xie se conoce además después de que otro de sus compañeros arrestados, el letrado Li Chunfu, fuera liberado este mes totalmente demacrado y “destrozado psicológicamente” tras casi un año y medio en manos de las autoridades, según la familia.