Aguirre se ofrece a Rajoy como candidata para la Alcaldía de Madrid
Esperanza Aguirre quiere encabezar la candidatura del PP para la ciudad de Madrid en las elecciones municipales del próximo mes de mayo. Así se lo ha hecho saber de múltiples maneras al presidente del Gobierno y de su partido, Mariano Rajoy. Y así lo ha repetido hoy en una rueda de prensa tras el Comité de Dirección del PP de Madrid: “Estoy a disposición del PP y de Mariano Rajoy y así se lo he transmitido”.
La líder del PP madrileño suma así presión a Rajoy, a quien se le agota el tiempo para señalar a los candidatos de las principales plazas. El 23 de enero está prevista la Convención Nacional del Partido Popular en Madrid. Y para entonces deberían estar nombrados, según las cuentas que echan en el partido.
Aguirre, según ha informado la cuenta de Twitter del PP de Madrid, ha asegurado ante la dirección del partido que ha dado el paso porque “no me gusta hacerme de rogar”. En la misma reunión, el exconsejero de Sanidad Javier Fernández-Lasquetty anunciaba que abandona sus cargos orgánicos en el partido para emprender carrera en el sector privado en Guatemala. Lasquetty dimitió después de que la Justicia tumbara su plan de privatización de la Sanidad madrileña.
Las opciones de la expresidenta del Gobierno regional parecían haberse esfumado tras el incidente que protagonizó con varios agentes de movilidad y policías locales que la multaron por aparcar en el carril reservado a los autobuses en plena Gran Vía de Madrid y por los numerosos escándalos en los que se ha visto implicada gente de su entorno, como la Gürtel, la Púnica y las tarjetas 'black'.
Aguirre, sin embargo, confía en ser la designada por Rajoy para intentar mantener la Alcaldía de Madrid. O así lo cree su entorno más directo. Los populares temen perder el Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid después de dos décadas de mayoría absoluta. La irrupción de Podemos es vista como una amenaza a su larguísima hegemonía.
Esperanza Aguirre abandonó la política en 2012. O eso parecía. El 17 de septiembre de aquel año anunciaba, por sorpresa, que dejaba la Presidencia de la Comunidad de Madrid tras nueve años en el cargo y 30 en la vida pública. “Vienen los nietos, he de ocuparme de mi madre, disfrutar de mi familia, mis siete hermanos, mis hijos... Hay que saber elegir el momento de marcharse. Y es este”, aseguró entonces. “No tiene vuelta atrás, es como cruzar el Rubicón”, zanjó.
La semana pasada, Aguirre advirtió durante la tradicional cena navideña del PP de Madrid, y en la que estuvo presente Mariano Rajoy, de la trascendencia de la cita electoral de 2015 en un panorama “muy inquietante” y especialmente en los partidos de la izquierda, frente a los que ha reivindicado la responsabilidad de los populares.
En esa misma reunión, dos de los pesos pesados de la dirección nacional del PP rebajaron las expectativas de Aguirre, cuya principal baza es la popularidad que mantiene entre el electorado madrileño. La número dos de Rajoy aseguró entonces que “no es un tema solamente de encuestas o sondeos”. Y añadió: “A veces hay personas que son muy populares en las encuestas pero no tienen posibilidades de ganar”. Carlos Floriano también reconocía poco después que una cosa es “la simpatía y el conocimiento”, y otra la imagen de buena gestión y honradez para el votante del PP.
Aguirre también ha respondido a estas apreciaciones: “No me gusta gobernar a golpe de encuestas”, ha asegurado ante la dirección de su partido. “Los afiliados prefieren la candidatura que mejor defienda nuestros valores”, ha remachado.
La trascendencia de la cita electoral y el miedo a Podemos se ha instalado en el seno del PP de Madrid. En el mismo discurso ante el Comité de Dirección del PP de Madrid, Aguirre ha hecho varias referencias explícitas al partido que lidera Pablo Iglesias, según recoge la cuenta de Twitter del partido.
La presidenta del PP de Madrid ha defendido además que sea su sucesor al frente del Gobierno regional, Ignacio González, quien encabece la lista del PP en las elecciones autonómicas, previstas también para mayo de 2015.