Cospedal admite por primera vez la veracidad de los 'papeles de Bárcenas'
El empeño de María Dolores de Cospedal por sentar cuanto antes en un banquillo a Luis Bárcenas ha permitido lo que siete meses de instrucción del caso de los ‘papeles’ en la Audiencia Nacional no habían ofrecido. Hoy, todo el país puede ver las imágenes del extesorero del PP acusando a Cospedal de haber cobrado dinero en negro. Bárcenas no dejó pasar la primera oportunidad que tuvo durante el juicio civil celebrado en Toledo y cuando su abogado le preguntaba por la autoría de los ‘papeles’, aseguró: “Estas anotaciones están hechas por mi mano y es mi mano la que entrega el sobre a la señora Cospedal”.
El juicio comenzó con Bárcenas y 'El País' como acusados y acabó solo con el primero en el banquillo. Tras la declaración del extesorero reconociendo que él era el autor de los 'papeles', el abogado de Cospedal, Adolfo Prego, anunció que retiraba la demanda contra el periódico. La confesión de Bárcenas suponía, dijo, “la máxima y soberana prueba” de que los 'papeles' son verdaderos. Por primera vez, la secretaria general del PP admitía su autenticidad, a pesar de que los peritos de la Policía, los contratados por los medios de comunicación y otro profesional, reclamado por el Juzgado de Toledo, ya se habían pronunciado en ese sentido.
Hoy era Bárcenas el acusado y Cospedal quien le reclamaba 100.000 euros por atentar contra su derecho al honor. Sin embargo, en varios momentos del juicio pareció que el acusador era él. El extesorero aprovechó el interrogatorio para repetir las principales acusaciones vertidas ante el juez Pablo Ruz el pasado 15 de julio. Repitió que le entregó 90.000 euros a Rajoy y Cospedal en sobres con billetes de 500, reiteró que en 2008 le había hecho otras dos entregas a la secretaria general por valor de 7.500 euros y, de paso, señaló a su antiguo amigo Jorge Trias como autor de la filtración de los ‘papeles’ con la supuesta ‘contabilidad b’ a ‘El País’.
Cospedal demandó en un juzgado de Toledo a Bárcenas a las dos semanas de que ‘El País’ publicara las fotocopias con la supuesta ‘caja b’ del PP. Decidió ir por libre, ya que su partido tardó aún varios días en presentar otra demanda en Madrid, a la que se adhirieron varios de los dirigentes aludidos por los ‘papeles’. A diferencia de Cospedal, el PP evitó demandar a Bárcenas. A diferencia de esos otros dirigentes del PP, ella mantenía un enconado enfrentamiento con él desde que el Congreso de Valencia encumbró a una como secretaria general y al otro como tesorero.
El debate sobre si la publicación de los ‘papeles’ había dañado el honor de Cospedal quedó difuminado tras las afirmaciones sobre el contenido de los mismos. En los ‘papeles’ se recogen dos entregas a Cospedal en 2008 por valor de 7.500 euros. Y Bárcenas dio su versión de donde se produjeron: la primera en el despacho de la secretaria general en la séptima planta de Génova 13 y la segunda, según creyó recordar, en el despacho que la presidenta de Castilla-La Mancha tiene en el Senado. “Contiguo al mío”, se explayó Bárcenas. Al preguntarle el fiscal si alguien presenció esos encuentros, el acusado entregó otro titular: “En las entregas de dinero negro no hay testigos normalmente”. Bárcenas enmarcó las entregas a Cospedal dentro de una “tradición” en el PP según la cual los máximos dirigentes percibían sobresueldos.
La declaración de Bárcenas se convertía así en un repaso por los grandes titulares que el caso ha dado hasta hoy. Defendió de nuevo que fue tesorero hasta marzo de 2010 y que siguió cobrando del partido 210.000 euros anuales, “como es sobradamente conocido”. Hasta se permitió asegurar que no siente “animadversión” hacia Cospedal. “Ella ya ha expresado que en su caso, sí. En el mío, no”, afirmó.
La secretaria general del PP escuchaba sin mirar en ningún momento la pantalla de plasma en la que aparecía Bárcenas sentado tras una mesa con el aspecto atildado de otras ocasiones, peinado con esmero y vestido con traje, corbata y pañuelo en el bolsillo. El extesorero iba indicando a cada una de las partes que le interrogaba que se acercaran al micrófono para que pudiera oírles con nitidez. El juicio solo se interrumpió una vez y fue a petición de Bárcenas, que solicitó al juez un receso para ir al baño.
Cospedal, por su parte, negó cualquier entrega de dinero negro. Al ser preguntada si otros dirigentes habían percibido sobresueldos explicó que los dirigentes consultados por ella misma se lo habían negado. Según su versión, tras resultar imputado Bárcenas en el ‘caso Gürtel’, la secretaria general se reunió con el extesorero tan solo en dos ocasiones para trasladarle su opinión de que tenía que dejar el cargo. Bárcenas se negó y no hubo más reuniones. “Tampoco esas que dice para darme 20 ó 25.000 euros”, añadió.
Durante el interrogatorio de la secretaria general del PP, el abogado de Bárcenas, Javier Gómez de Liaño, intentó interrogarla sobre el supuesto soborno del PP castellano-manchego a cargo de una empresa que consiguió un contrato de basuras en Toledo. El juez lo interrumpió por estar investigándose el asunto en la Audiencia Nacional.
El director de 'El País', Javier Moreno, declaró como testigo y descartó a Bárcenas como la persona que les entregó los ‘papeles’. Por su parte, Jorge Trias rechazó haber sido el filtrador.