Barcina no descarta unas segundas elecciones en Navarra, que dependerán del PSN

La presidenta del Gobierno de Navarra, Yolanda Barcina, no descarta, en una entrevista con Efe, unas segundas elecciones forales este año, en función de los resultados de los comicios del 24 de mayo, y asegura que “la llave”, como en anteriores ocasiones, la tiene el PSN-PSOE.

“No depende de nosotros. En este momento, todo es posible en Navarra”, ha asegurado la presidenta, que ha reconocido que, con una previsión de ocho partidos representados en el Parlamento de Navarra, “los pronósticos son complicados de hacer”.

La también presidenta de UPN, que no figura en la lista electoral de la formación regionalista, encabezada por su compañero de gabinete Javier Esparza, ha lamentado que pueda llegar al poder una formación como EH Bildu: “Nos preocupa que España tenga 16 comunidades autónomas en lugar de 17”, ha dicho, en referencia a una posible integración de Navarra en Euskadi.

En ese sentido, ha confiado en que los socialistas no cumplan su compromiso de no volver a pactar con UPN y les ha preguntado “por qué se avergüenzan de todo lo bueno que han acordado en Navarra”, la última ocasión en 2011, cuando formaron un Gobierno de coalición que sólo duró un año.

El PSN, ha indicado, habla de cambiar en Navarra el Gobierno de UPN pero no el de Andalucía, presidido por Susana Díaz, donde el PSOE lleva treinta años gobernando. A su juicio, “son unos artistas a la hora de buscar palabras” cuando aluden a un cambio de “régimen”.

Barcina se ha preguntado si cambio significa “volver a quienes todavía no han condenado asesinatos de ETA”, en alusión a Bildu.

Uno de los momentos más difíciles de la legislatura fue el de la polémica generada en marzo de 2013 por las dietas dobles y triples en Caja Navarra. Bajo su mandato, ha recordado, se suprimió, en 2011, no solamente la Comisión Permanente sino la propia Junta de Entidades Fundadoras, órganos en los que se cobraban las dietas.

La presidenta ha censurado que, al tiempo que todavía se le critica por este caso, “lo que se estaba haciendo (entonces) con la Kutxa en el País Vasco no se estudia”, por lo que cree que hay dos “varas de medir”.

Barcina, cuya imputación por el caso fue rechazada por el Tribunal Supremo, se lamenta de que el asunto “siga teniendo actualidad en estos momentos”. “Igual (se) tiene que pasar factura cómo funcionaban todas las cajas en España, en Madrid, en el País Vasco, todos”, se ha preguntado.

A su juicio, la corrupción es “una gran lacra de esta sociedad”, que se debe erradicar desde el criterio de que “el que la hace, la paga” para “retirar las manzanas podridas” de la política.

Es un objetivo, el de la transparencia, en el que deberá profundizar el nuevo Gobierno de Navarra, porque ella tiene “totalmente asumido” que le queda poco tiempo en la presidencia, e incluso en esta campaña electoral tendrá un papel “completamente secundario” y será el candidato Javier Esparza “quien lidere todo, para que así no haya malentendidos”.

La presidenta navarra, que ha ocupado el cargo durante los últimos cuatro años, ha asegurado que ha mantenido unas relaciones “cordiales” con el Gobierno de España, que han permitido “arreglar muchos problemas importantes para los navarros”, sobre todo la pervivencia del Fuero.

El Fuero forma parte de la historia de Navarra, está recogido en la Constitución y es una forma de “ser solidarios con el resto de España”, ha dicho Barcina, que ha opinado que quizás hay que hacer “pedagogía” sobre el régimen foral, porque “últimamente, a nivel nacional, hay muchas cuestiones que se han debatido y que no se han entendido”.

Uno de los aspectos que Barcina destaca al hacer balance de legislatura es que ETA “haya sido vencida policialmente”, aunque todavía no lo ha sido “social y políticamente”, porque sigue habiendo personas que “niegan el reconocimiento a los verdaderos héroes de la democracia, que son las víctimas del terrorismo”.

Además de por su actividad política, Barcina ha aparecido en los últimos meses en los medios de comunicación por su relación con el expresidente de Endesa, exdiputado del PP y adjunto a la presidencia de El Corte Inglés, Manuel Pizarro.

No obstante, la presidenta navarra es celosa de su intimidad: “No me interesa la vida privada de los demás y no entiendo que interese la mía”, ha aseverado Barcina, que ha resaltado que su domicilio está en Pamplona y “seguirá estando en Pamplona”, donde en principio tiene previsto pedir el regreso a su cátedra en la universidad.