García Escudero dice que Correa le regaló un reloj que devolvió de inmediato

El presidente del Senado, Pío García Escudero, ha reconocido hoy en el juicio a la red Gürtel que Francisco Correa, le regaló un reloj pero que él se lo devolvió “inmediatamente” y que Álvaro Pérez, El Bigotes, le regaló un móvil en una campaña electoral porque el suyo estaba roto.

García Escudero ha testificado hoy en el macrojuicio a la primera época de la trama Gürtel a petición del abogado del exalcalde de Majadahonda Guillermo Ortega en relación a su responsabilidad como presidente del PP de Madrid entre 1993 y 2004.

Lo ha hecho dos horas después de que compareciese como testigo el presidente del Gobierno Mariano Rajoy y durante su declaración ha admitido haber sido obsequiado con un reloj por parte de Correa que, no obstante, él le devolvió “inmediatamente”, si bien no ha especificado en qué contexto se produjo el regalo.

Sí que aceptó, según ha dicho, un teléfono de móvil que El Bigotes le regaló en una campaña electoral: “Me lo regaló en plena campaña un día que tenía el teléfono estropeado y me dio un Nokia normal de aquella época”.

García Escudero ha negado haber percibido pagos del PP ajenos a su retribución habitual a excepción de un préstamo que solicitó al partido en el año 2000 tras haber sido víctima de un atentado en el que ETA puso un coche bomba en el portal de su casa.

El presidente del Senado ha explicado que para poder tramitar las indemnizaciones el Consorcio de Seguros y el Ministerio del Interior le pedían que hiciese frente a los gastos de reparación de su casa y que después presentase las facturas.

Como el desembolso era “muy importante”, ha dicho, pidió un préstamo de cuatro millones de pesetas que después devolvió en cuatro plazos.

Pero ha negado que percibiese dinero del partido en concepto de devolución del citado préstamo en diciembre de 2001, como figura en los denominados papeles de Bárcenas.

“Cuando comparecí ante el juez Ruz ya le dije muy claro que no reconocía esta anotación”, ha explicado.

Tampoco ha reconocido que el PP le pagase en efectivo 6.000 euros en 2003 o que, por indicación de algunas empresas de Correa, su secretaria recibiese 500 euros a su nombre: “No, no es correcto y mi secretaria lo desmintió todas las veces que se le ha preguntado”.

El presidente del Senado ha dicho que en 2008 acudió a una comida de despedida del extesorero del PP Álvaro Lapuerta, a la que también asistió la exministra Ana Mato y el exsecretario del PP Javier Arenas, en la que cree que se obsequió a Lapuerta con una bandeja, si bien ha aclarado que no tiene “la menor idea” de quién se encargaba de ese tipo de regalos.