El Gobierno confía en que ERC y PDeCAT convenzan a Puigdemont para dar un paso atrás en la investidura
- La vicepresidenta primera del Gobierno se muestra convencida: “Puigdemont no va a ser presidente de la Generalitat”
El Gobierno no tiene en su mano evitar preventivamente la investidura de Puigdemont y fía toda su suerte a que ERC y PDeCAT convenzan al expresident para dar un paso atrás y cesar en su intención de ser nombrado a distancia. El margen legal con el que cuenta Rajoy para presentar un recurso preventivo ante el Constitucional es prácticamente inexistente. Según fuentes del alto tribunal, “si el Parlament propone a Puigdemont como candidato sin referencia a la investidura telemática, es muy difícil recurrirlo, porque sería como recurrir el cumplimiento del reglamento”.
Con poco margen para la reacción judicial previa, el ejecutivo tiene toda su confianza puesta en un cambio de actitud por parte del expresidente y en las presiones que sobre él pudiera ejercer ERC y el PDeCAT. “No se pueden permitir el lujo de investir a Puigdemont. Su urgencia es hacer un Gobierno para volver a manejar el presupuesto”, aseguran a eldiario.es fuentes del Gobierno. “Ellos han puesto candidatos en circunstancias muy determinadas. Ahora tienen que decidir como lo gestionan”, aseguran las mismas fuentes.
A pesar de todo ello, los mensajes que emanan de Moncloa continúan instalados en que Puigdemont no será nombrado a distancia. En una entrevista con la Cope, la vicepresidenta del Gobierno aseguraba este lunes que “Puigdemont no va a ser presidente de la Generalitat”.
En el Constitucional esperan que el Gobierno presente un recurso de inconstitucionalidad con posterioridad al virtual nombramiento. Para hacerlo, Rajoy necesita que el Consejo de Estado se reúna y redacte un informe, además de convocar al Consejo de Ministros para aprobar la decisión.
Más fáciles serán los trámites para el PSC y Ciudadanos, que podrán recurrir en amparo ante el TC el mismo día de la investidura. Fuentes del PSC aseguran que ya tienen preparado ese recurso y que en él incluirán “una petición de medidas cautelarísimas” para que se suspenda el acuerdo de la mesa que permita la investidura telemática.
En el partido que dirige Miquel Iceta también confían en que sean ERC y PDeCAT quienes finalmente consigan convencer a Puigdemont para dar un paso atrás. Ambas formaciones han empezado a negociar el reparto de carteras en el Govern. Además, en la reunión que la líder del PDeCAT, Marta Pascal, mantuvo este miércoles con Puigdemont en Bruselas se acordó la creación de un grupo de trabajo para empezar a redactar el programa de gobierno.