Lissavetzky pretende repetir como candidato del PSOE a la Alcaldía de Madrid

El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Madrid, Jaime Lissavetzky, está “absolutamente dispuesto” a presentarse a las primarias para elegir el candidato socialista a la Alcaldía de Madrid e invita a sus compañeros a ver qué pasaría si repiten candidato, algo que no sucede desde 1995.

En una entrevista con Efe, Lissavetzky señala que una de las quejas y planteamientos que se hacen los socialistas madrileños es que los candidatos que pierden unas elecciones deben aguantar en la oposición, así como reflexionar qué ocurre si repiten dos veces con el mismo cabeza de cartel.

En este sentido, el portavoz del PSOE recuerda que los socialistas no han repetido un candidato a las elecciones municipales madrileñas desde 1995, cuando Juan Barranco se presentó tras haber perdido los comicios de 1991.

Posteriormente, en cata cita electoral, se han sucedido diferentes candidatos socialistas: Fernando Morán (1999); Trinidad Jiménez (2003); Miguel Sebastián (2007), y el propio Lissavetzky (2011).

“Yo dije que venía para quedarme y me he quedado, y he cumplido”, agrega el dirigente socialista, quien muestra su disposición a encarar unas elecciones primarias.

En este sentido, expresa su “relativa tranquilidad” y asegura que no le preocupa lo que están haciendo los demás, en referencia a Enrique del Olmo, quien ya ha anunciado que se presentará al proceso de primarias, así como a otro de los posibles candidatos, el diputado autonómico Antonio Miguel Carmona.

“Creo que puedo ganar la Alcaldía de Madrid. No solamente tengo disposición, sino muchísimas ganas para hacerlo”, añade.

“Ana Botella no toma decisiones”

En cuanto a la situación actual del Ayuntamiento de la capital, Lissavetzky afirma que se encuentra con “un gobierno casi en sede vacante” y “como atrapado en el tiempo”, porque la alcaldesa, Ana Botella, “no toma decisiones”, sino que “espera que las cosas se arreglen así, por las buenas”.

Según el portavoz socialista, Botella “ha sido incapaz de tomar los problemas como problemas reales, ha vivido en una burbuja en el Palacio de Cibeles, y deja pasar los días y que caigan las hojas del calendario tranquilamente”.

La alcaldesa, en opinión de Lissavetzky, será recordada por la tragedia del Madrid Arena, la huelga de limpieza y la venta de edificios municipales y patrimonio.

“Un madrileño es hoy mucho más pobre que cuando llegó Botella. Esa es la realidad”, apostilla.

En relación a la deuda del Consistorio, el portavoz del PSOE la cifra en 7.000 millones de euros, lo que, a su modo de ver, “ha puesto a Madrid en una situación muy difícil”, y explica que “uno de cada tres euros del presupuesto de gastos, más de uno de cada tres euros, porque son un 34 %, va a los bancos directamente”.

“Podemos -continúa- quedar como los primeros de la clase en pagar a los bancos por las deudas contraídas de esa enorme fiesta en la que se convirtió Madrid con el PP en los últimos años”.

Lissavetzky habla incluso de “desmadre” y “cortijo”, y pone como ejemplo el Madrid Arena, “donde entraba una señor que vendía miles de entradas -parece que 22.000, dicen ahora los jueces-, y las vendía como quería, cuando quería y donde quería, y se le daban condiciones favorables”.

Sobre la situación del PP de Madrid y las discrepancias entre la Comunidad de Madrid, la Delegación del Gobierno y el Ayuntamiento, dice que lo que deben hacer es sentarse en Génova para ponerse de acuerdo entre ellos y que “no mareen más a los madrileños”.

Tras rechazar la propuesta de Botella de ordenar las manifestaciones en el centro de la capital, ya que, según él, sería “absurdo”, Lissavetzky acusa a la presidente del PP madrileño, Esperanza Aguirre, de haberse comportado de “una manera absolutamente poco presentable” en su incidente en la Gran Vía con agentes de movilidad del Ayuntamiento de Madrid.