La Lomce recibe en el Senado 8 propuestas de veto y 896 enmiendas parciales

La reforma educativa que defiende el ministro José Ignacio Wert ha recibido en el Senado ocho vetos de la oposición, con los que piden la retirada de la norma, y 871 enmiendas parciales, además de otras 25 desde el grupo popular, y todo ello empezará a ser estudiado esta semana en la Cámara alta.

Tanto las propuestas de veto -previsiblemente serán rechazadas por el PP gracias a su mayoría parlamentaria- como las enmiendas protagonizarán este jueves la primera reunión para preparar la ponencia que debatirán después los senadores el día 12.

Finalmente, está previsto que el día 20 se voten los vetos y enmiendas en el Pleno del Senado, han explicado a Efe fuentes parlamentarias.

El proyecto de Ley Orgánica para la Mejora de la Calidad (Lomce) recibió, en su día en el Congreso, 11 vetos y 770 enmiendas parciales.

Los vetos de rechazo en el Senado, presentados el pasado día 31 de octubre, han sido presentados por el grupo socialista, CiU, Entesa, EAJ-PNV y, dentro el grupo mixto, por IU, ERC-Esquerra y Amaiur.

Para el PSOE, la Lomce es “una norma profundamente ideológica y cuya aprobación provocará un deterioro de la equidad y la calidad en la educación pública”, según su veto.

Los grupos nacionalistas vetan la Lomce porque, a su juicio, invade competencias autonómicas, especialmente en las lenguas cooficiales.

CiU argumenta que la reforma tiene una finalidad de “recentralización” del sistema educativo con voluntad de homogeneizarlo, sin previos consensos y excluyendo a las comunidades autónomas, incluso a aquellas como Cataluña, con lengua y cultura propias diferentes del castellano.

Los senadores de Entesa piden la devolución del texto por “innecesario” e “injusto”, por subordinar la educación pública a la concertada y a la privada, o por segregar y discriminar a los alumnos más vulnerables, entre otras razones.

El grupo vasco afirma en su veto que la reforma no reconoce al País Vasco “especialidad alguna en materia de enseñanza” y “transgrede” su singularidad constitucional.

Desde ERC-Esquerra se argumenta que la Lomce establece un modelo educativo “inspirado en una ideología nacionalista española que tiene como objetivo, tal como el mismo ministro tuvo la voluntad de dejar evidenciado, que los profesores enseñasen a sus alumnos el orgullo de ser españoles, a vertebrar la nación española y a españolizar a todos los niños catalanes”.

IU también sostiene que se trata de una ley “innecesaria” y alega que ha sido redactada “de espaldas a la comunidad educativa”.

Además, Foro Asturias y UPN han registrado en el Senado enmiendas parciales al proyecto de ley.

UPN insta en una de sus enmiendas a que las Administraciones puedan determinar como requisito para el ingreso en los cuerpos de funcionarios docentes el conocimiento de un idioma extranjero, y Foro Asturias propone, entre otros aspectos, que se introduzca Filosofía en la Educación Secundaria Obligatoria (ESO), que se cambie en dicha etapa el concepto “evaluación” por el de “prueba individualizada” o que el bachiller sea de tres años.

Por último, el PP ha registrado 25 enmiendas, entre ellas varias encaminadas a “mejorar” el calendario de implantación para facilitar la adaptación de centros, directivos y docentes a la nueva normativa y hacerlo más compatible con la situación presupuestaria de las comunidades.

Así, propone ampliar de dos a tres años la implantación prevista y retrasar hasta 2017 las evaluaciones finales en ESO y Bachillerato.