Macedonia cierra la crisis política y adelanta las elecciones a abril de 2016

La Antigua República Yugoslava de Macedonia (ARYM) celebrará elecciones anticipadas el 24 de abril de 2016, según el acuerdo alcanzado hoy por los líderes de los principales partidos, que pusieron con ello fin a una crisis política que lleva prolongándose desde hace meses.

Los partidos acordaron asimismo que a partir del 15 de enero de 2016 hasta la fecha de la celebración de los comicios se formará de un Gobierno técnico encargado de preparar las elecciones.

En ese Gobierno transitorio, el principal partido de la oposición, la Unión Socialdemócrata de Macedonia (SDSM), encabezará el ministerio de Interior, como garantía para que el proceso electoral sea limpio y democrático.

Desde las Legislativas celebradas en abril de 2014, el SDSM no ha participado en un solo debate parlamentario, pues acusó al partido gobernante, el conservador VMRO-DPMNE del primer ministro, Nikola Gruevski, de haber cometido fraude electoral, extremo que no confirmaron los observadores internacionales.

En el acuerdo alcanzado esta madrugada, tras casi veinte horas de conversaciones, el SDSM se compromete a regresar al Parlamento antes de septiembre.

Las negociaciones contaron con la mediación del comisario de la Unión Europea para la Ampliación, Johannes Hahn en Skopje.

“Este día es excelente para su país y abre las puertas para sus perspectivas euroatlánticas. Este es un impulso perfecto para el país ”, dijo Hahn después de alcanzarse el acuerdo.

El líder del SDSM, Zoran Zaev, informó de que el acuerdo contempla la dimisión del primer ministro a finales de año, lo que, dijo, abrirá el camino hacia “elecciones transparentes y justas”.

“Estoy muy satisfecho con el acuerdo. La crisis política está ahora resuelta. Vamos a ganar las próximas elecciones con seguridad”, dijo Gruevski.

La situación política en este pequeño país balcánico de dos millones de habitantes se tensó aún más hace seis meses, cuando el SDSM empezó a publicar el contenido de conversaciones telefónicas intervenidas, que supuestamente implican a varios ministros y al propio Gruevski en delitos de abuso de poder.

 El primer ministro afirmó que las conversaciones habían sido falsificadas y que con esta campaña los socialdemócratas habían orquestado una operación para derrocar el Gobierno, todo ello con el “respaldo de algunos servicios de inteligencia extranjeros”.

El acuerdo alcanzado esta madrugada contempla además el nombramiento de un nuevo fiscal encargado de investigar el caso.