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El director de Método 3 asegura que una de las comensales conocía la grabación de La Camarga
El director de la agencia de detectives Método 3, Francisco Marco, ha asegurado este lunes que la grabación de la conversación en el restaurante La Camarga entre la líder del PPC, Alicia Sánchez-Camacho, y la expareja de Jordi Pujol Ferrusola Victoria Álvarez se hizo con el consentimiento de una de ellas. En un comunicado remitido a Efe, Marco, imputado en esta presunta trama de espionaje político, ha afirmado que los documentos intervenidos en el registro policial a la sede de Método 3 han demostrado que su contenido era “absolutamente legal”.
La titular del juzgado de instrucción número 14 de Barcelona, Elisabet Castelló, sigue con la investigación para descubrir quién ordenó grabar la conversación privada que mantuvieron el 7 de julio de 2010 en el restaurante La Camarga de Barcelona Alicia Sánchez-Camacho y Victoria Álvarez. Un informe de la Policía Nacional que figura en el sumario del caso concluye que el PSC pagó a Método 3 un total de 1.750 euros por la grabación de la conversación. En este sentido, CiU advirtió este sábado de una “maquinación de PSC y PP para dañar” a la coalición nacionalista, en este caso a base de revelar los supuestos tejemanejes de los hijos de Jordi Pujol.
Marco, que ante la juez defendió que la intermediación para contratarles en el caso de La Camarga procedió del “entorno” de la líder del PPC, insiste en el comunicado que la grabación se hizo “de forma legal y con el consentimiento de una de las intervinientes en la comida”. El director de Método 3 señala en el comunicado que todavía no se han llevado a cabo en la causa las diligencias que reclamó para poder acreditar el consentimiento en la grabación por parte de una de las intervinientes en la comida.
Marco denuncia presiones de Interior para “salvar” a Camacho, según 'Ara'
En el sumario del caso, al que ha tenido acceso el diario 'Ara', consta como Marco denunció ante el juez haber recibido presiones por parte del Ministerio del Interior para evitar que se relacionara a Camacho con el encargo del espionaje y para que no se difundiera el contenido de la cinta. El director de la agencia afirmó ante el magistrado que un agente del CNI fue a su encuentro y le dijo, en referencia a la grabación: “Sabemos que Alicia lo sabía. Sálvala. Calla o te haremos callar”. En su declaración ante el magistrado, Marco fue más allá de lo que afirma hoy en su comunicado, según 'Ara', al decir que “lo más seguro” es que fuera Camacho quien pidiera la grabación.
El director de Método 3 comunicó al juez las “presiones y chantajes velados” que recibió por parte del ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, y del Gobierno español, según recoge el 'Ara'. El director de la agencia no concreta cuáles fueron esas presiones, pero sí constata la intervención del CNI instándole a “callar”.