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Miles de personas se concentran en Sol en apoyo a la moción de censura de Unidos Podemos contra Mariano Rajoy

Los líderes de Unidos Podemos y las confluencias, en la concentración por la moción de censura.

Laura Galaup

Puerta del Sol. Seis años después del 15M y la acampada que se formó en esta plaza del centro de Madrid, Podemos, IU, En Comú y En Marea han convocado a la ciudadanía a un acto en apoyo a la moción de censura contra el gobierno de Mariano Rajoy, en el que participan portavoces de Unidos Podemos y las confluencias, así como activistas sociales. Al grito de “Sí se puede” y “contra la corrupción, apoyamos la moción”, miles de asistentes han recordado el movimiento que nació tras el 15 de mayo del 2011.

“Nos están robando”, ha apuntado Nina, que ha venido procedente del madrileño municipio de Fuenlabrada. Esta activista ha asegurado que las políticas promovidas por el Partido Popular han provocado que los cuatro miembros de su familia estén en el paro. “No cobramos absolutamente nada, yo tengo que estar pidiendo constantemente a mis amigos, a mi familia y a Cáritas para poder comer”. Por eso considera que la moción de censura les ayudará a salir del “pozo” en el que se encuentran. “Es la última esperanza a nivel político”, ha apuntado su compañera antes de que comenzasen las intervenciones.

El cantante Víctor Lemes ha sido el encargado de comenzar el acto versioneando un popurrí de canciones conocidas adaptando la letra a los “corruptos tiempos que estamos viviendo”. Los perfiles de los asistentes han sido muy variados, grupos de jóvenes y de adultos, así como familias con niños pequeños.

Durante los discursos de políticos y de activistas sociales, los manifestantes han dado muy buena acogida al recorrido hecho por Pablo Iglesias sobre los recortes sociales promovidos por los gobiernos populares y el argumento planteado por Irene Montero, recordando que las anteriores mociones de censura han sido siempre defendida por hombres.

“Somos la gente que sufrimos y que padecemos la política de los rateros. Estamos aquí porque tenemos que estar, como tendría que estar todo español que sea honrado y el que no tenga vergüenza que se vaya con el PP”, ha explicado Manuel, residente en Las Cabezas de San Juan (Sevilla), reflexionando sobre la presencia de miles de personas a esta concentración.

Podemos ha movilizado 52 autobuses para que sus simpatizantes pudieran asistir a esta concentración desde la práctica totalidad de las comunidades autónomas, y se han trasladado autocares de Andalucía, Cataluña, Comunidad Valenciana, Galicia, Castilla-La Mancha, Castilla-León, La Rioja, País Vasco, Cantabria, Asturias, Murcia, Ceuta, Melilla e incluso las islas.

Manuel junto a sus compañeros ha salido a las 10 de la mañana, desde su municipio han fletado un vehículo en el que han viajado 53 personas con “mucho jolglorio”. “Hemos venido a contarle a esta gente lo que estamos sufriendo”, ha aseverado. Este sevillano se mostraba satisfecho por la cantidad de gente que ha acudido, pero también ha recordado que “hay muchas criaturitas” que no se han desplazado a la Puerta del Sol “porque no tienen medios”.

Tres jóvenes del Sindicato de Estudiantes de Izquierda Revolucionaria coincidían con este andaluz al destacar la importancia de que Podemos vuelva a manifestarse. “Las transformaciones de la sociedad se han hecho en la calle”, ha reseñado Manuel. “Nos parece bien que Podemos siga dando la batalla fuera de las instituciones y no queremos que solo se quede aquí”, ha recordado Daniel, miembro de este colectivo juvenil.

A su vez estos estudiantes han apuntado que aunque la moción de censura no se apruebe, “lo importante es sacar a la gente a la calle”. Entre los ejemplos que han destacado, y que señalan que se deben de seguir como ejemplo, apuntaban a la lucha de los trabajadores de la fábrica de Cocal Cola en Fuenlabrada y las huelgas estudiantiles contra la LOMCE. “Creemos que es el paso que debe dar este partido para derrotar al Gobierno de corruptos que tenemos”, incidía uno de sus compañeros.

La puerta del Sol, además, ha sido la última parada del tramabús. Muchas de las personas que han acudido han aprovechado la presencia de este polémico vehículo para hacerse fotos con algunos de los personajes retratadados. El tramabús cierra así su periplo por España en el epicentro de los escándalos de corrupción que están acorralando al Partido Popular y al Gobierno: Madrid. La concentración se ha celebrado justo frente a la sede del Gobierno regional que preside Cristina Cifuentes, hoy señalada por la Operación Púnica.

La Operación Lezo, Gürtel y Púnica no solo han estado presentes en las intervenciones políticas, también entre los manifestantes. Mientras los representantes políticos hacían un recorrido por los últimos titulares relacionados con operaciones corruptas, un tupper con chorizos y las siglas del Partido Popular ha servido a varios manifestantes para hacer chascarillos sobre la llegada de Ignacio González a Soto del Real.

Una madrileña ha paseado este envase de plástico, acompañado por unas esposas, por la Puerta del Sol. “Es una representación de lo que consideramos que es el PP, no son solo chorizos, son una ladrones y tendrían que estar en la cárcel”, ha incidido Mabel, la promotora de esta idea.

Fernando, un gaditano, estudiante de Ciencias Políticas en Madrid, también ha acudido a la concentración con material elaborado en su casa. Un cartel con la palabra corrupción, en el que ha incluido el logo del PP. “Se ha demostrado que el PP es un trama de crimen organizado, los 800 casos aislados hablan por sí solos”, ha respondido.

Este joven no se ha limitado a recordar los casos que se están investigando en los tribunales, también ha querido incidir en las consecuencias de las políticas educativas, en especial, la subida de tasas universitarias: “Si a mi no me dan la beca no puedo estudiar”. Muchos manifestantes han justificado su asistencia haciendo un listado de los recortes sociales ejecutados por gobiernos populares.

Andrés, procedente de Fuenlabrada (Madrid), ha justificado su presencia en esta concentración asegurando que “tienen que entrar los obreros a gobernar”. “No más desahucios, no más corruptos. Queremos que Mariano Rajoy se vaya”. Este asistente ha considerado que es positivo que ningún partido se sume a la moción de censura.

“¿Qué hizo Felipe González en los 80? Presentó una moción de censura. ¿Le sirvió para algo? Para coger luego el poder”, ha incidido. Su compañero de municipio le daba la réplica: “Dar la espalda al pueblo un día sí y otro también, significa que el deseo del pueblo se hace realidad. La gente despierta y acaba votando a los que creen que le pueden sacar del atolladero”.

Entre los grupos de manifestantes mayores de 40 años, las primarias del PSOE ha sido uno de los temas centrales de conversación. Amelia, una madrileña jubilada, “luchadora hasta la muerte” ha recordado que en décadas anteriores ha votado a los socialistas. “Viendo en lo que se han convertido no quiero saber nada de ellos”, ha respondido.

Además, se muestra defraudada, no tiene grandes esperanzas en que alguno de los candidatos apoye la iniciativa lanzada por el grupo político de Pablo Iglesias. “A lo mejor Pedro Sánchez haría algo, pero como va dando bandazos no podemos contar con él, está presionado por los viejos socialistas”, ha advertido.

“Estos ni son socialistas ni son nada”, ha rebatido sobre este tema Manoli. Esta reparadora de tapices, que vive en Getafe, ha asegurado que su padre estuvo en la cárcel durante el franquismo por ser de izquierdas y socialistas. “Se han cargado la palabra socialistas, son igual de chorizos que los del PP”, apuntaba en alusión a la abstención de este grupo para apoyar el Gobierno de Mariano Rajoy.

En la concentración, cómo sucedió durante el 15M, el sol ha estado muy presente y en varias ocasiones desde el escenario han reclamado la presencia del equipo médico en determinados puntos de la plaza para atender a alguno de los asistentes.

La concentración ha coincidido con la nueva acampada de la asociación Velaluz. Muchas de sus asistentes han pitado en varias ocasiones las intervenciones de los representantes políticos, recordando las denuncias de acoso en algún círculo de Podemos.

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