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El PP se revuelve contra el 8M: el movimiento feminista percibido como amenaza
El partido de Mariano Rajoy tacha la huelga feminista de “insolidaria”, “elitista”, de buscar “el enfrentamiento” y acusa a Pablo Iglesias de convocarla
Ambos partidos intentan erosionar el 8M como una acción partidista cuando el propio movimiento ha reivindicado su carácter autónomo
También Ciudadanos arremete contra la movilización y su portavoz, Inés Arrimadas, sostiene que la convocatoria va “contra el sistema capitalista”
Insolidaria. Elitista. Anticapitalista. Y convocada por Pablo Iglesias. La colección de inexactitudes, medias verdades e imprecisiones que Gobierno, PP y Ciudadanos están arrojando con beligerancia contra la huelga feminista del 8M apuntala la idea de que ambos partidos perciben el movimiento feminista como una amenaza para el statu quo cuya repercusión dependerá en gran medida del éxito de la convocatoria de la semana que viene.
Las manifestaciones del 8M de 2017 ya desbordaron las previsiones de los organizadores. Desde entonces el feminismo ha incrementado su presencia como movimiento transversal, que rompe fronteras de partidos e instituciones y cuyo crecimiento no parece tener fin.
En noviembre de ese mismo año, en pleno juicio contra La Manada, y en pleno juicio paralelo contra la vícitma, decenas de miles de personas marcharon en múltiples ciudades de España contra las violencias machistas en una convocatoria que cogió desprevenidos a propios y extraños.
El fuego contra la huelga del 8M lo abrió la portavoz de Ciudadanos, Inés Arrimadas, quien en una entrevista en La Sexta aseguró que algunas reivindicaciones “van contra el sistema capitalista”. Sin especificar cuáles, la ganadora de las elecciones en Catalunya el pasado 21D ha reiterado después su rechazo a “mezclar la igualdad con cuestiones ideológicas”.
“Convocada por Pablo Iglesias”
En el mismo sentido se ha pronunciado la vicesecretaria de Estudios y Programa del PP, Andrea Levy, quien acusó a las promotoras de la huelga de “concatenar muchas otras cosas que no tienen que ver con la brecha salarial, que no tienen que ver con esa igualdad real”.
El vicesecretario de Política Social y Sectorial del PP, Javier Maroto, ha asegurado que su partido no apoyará la protesta convocada para la jornada del 8 de marzo, Día de la Mujer, porque está auspiciada por Podemos.
“No podemos apoyar una manifestación convocada por Pablo Iglesias, es la manifestación de Podemos y lo sabe todo el mundo, creemos que la igualdad de oportunidades no se alcanza con la manifestación que quiere Pablo Iglesias, que lo que le gusta es el ruido”, decía este sábado antes de participar en una Convención sobre Familia y Conciliación que el PP ha celebrado en Zaragoza.
A Maroto le respondió en Twitter el propio Iglesias. Pero también muchas mujeres para reivindicar su emancipación.
Podemos, y otros partidos como el PSOE, IU, Equo o sindicatos como CCOO, UGT, CNT, CGT, y un largo etcétera de organizaciones políticas y sociales han mostrado su adhesión y apoyo a la convocatoria del 8M.
La ministra Isabel García Tejerina ha llegado a apostar por una “huelga a la japonesa” para “demostrar las capacidades que tenemos las mujeres en este país”
El argumentario señala que la protesta pretende “romper nuestro modelo de sociedad occidental” que es “la que más ha avanzado en la consecución de derechos y oportunidades para las mujeres” y apuesta “por el enfrentamiento entre mujeres y hombres” en detrimento de la unidad.
En el PP señalan que se trata de una convocatoria “elitista” porque solo la pueden hacer las personas que tengan empleo, cuando la convocatoria alude expresamente a una huelga en tres vectores. Además de los clásicos paros laborales, se promueve “huelga de cuidados” que permita sumarse a las mujeres que trabajan sin cobrar nada a cambio, y “de consumo”.
La ministra de Defensa, María Dolores de Cospedal, también ha criticado la huelga. La también secretaria general del PP ha declarado que “puede ser un acontecimiento o un gesto de impacto”, pero no le ve “trascendencia ni relevancia para las mujeres”. En su opinión, deberían participar “hombres y mujeres”.
Las organizaciones feministas precisamente han invitado a los hombres a encargarse de las tareas feminizadas, de cuidados, y a hacer visible el peso del trabajo femenino en los lugares de trabajo.