PP y PSOE acuerdan frenar mociones municipales sobre Catalunya para evitar tensiones
El Partido Popular y el PSOE han cerrado un acuerdo para evitar que se reproduzca la imagen de desunión que se registró en el Congreso de los Diputados tras la derrota de la propuesta de Ciudadanos de respaldo a las acciones del Gobierno y los tribunales para frenar el referéndum independentista en Catalunya del 1-O.
Fuentes del Partido Popular explicaron que el coordinador general del PP, Fernando Martínez Maillo, y el secretario general de los socialistas, José Luis Ábalos, están “trabajando coordinadamente para frenar mociones sobre Catalunya que puedan ser planteadas en los ayuntamientos”.
“No hay que generar un debate que añada más tensión aún en el resto de España, no tiene ningún sentido. Derivar este tema por toda España no nos gusta, es alimentar un conflicto que ya es bastante grave”, apuntan fuentes del PSOE.
“Algunos de nuestros alcaldes nos han comentado que querían poner en marcha mociones de apoyo a los alcaldes catalanes, pero se les ha parado para evitar más tensiones”, añaden las mismas fuentes socialistas.
Aunque el PP vio con buenos ojos la proposición no de ley de Ciudadanos en respaldo al Gobierno y a los tribunales para frenar el referéndum del 1-O, el resultado final de la votación por las desavenencias entre el PSOE y Ciudadanos ha levantado fuerte suspicacias a que se repitan en otros ámbitos institucionales, ya sean autonómicos o municipales. “Todo el mundo asume que esto es suficientemente grave como para ir haciendo juegos florales”, avisan desde el PSOE al partido de Albert Rivera.
Para Moncloa se ha convertido en una prioridad mantener la imagen de unidad de con PSOE y Ciudadanos ante el reto de los secesionistas. El objetivo es mostrar que el Ejecutivo no actúa en solitario, sino que está respaldado por la mayoría de los partidos políticos, un mensaje muy importante de cara al exterior.
El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, señaló en su última declaración institucional como “imprescindible” la colaboración y apoyo de las fuerzas políticas “que saben que este es el momento de proteger a la nación y no de ponerla en duda. No entiendo su actitud como un apoyo al Gobierno, sino como un compromiso con España, con su democracia y con el conjunto de los españoles”.
En este sentido, el Partido Popular ha dado órdenes para evitar una respuesta a las críticas o los ataques de otras fuerzas políticas constitucionalistas, a pesar de las lanzadas por el líder de C's, Albert Rivera, que llegó a decir que estaba “harto de partidos en España que han pactado con los nacionalistas, y hoy se llevan las manos a la cabeza. Han entregado las llaves de la autonomía sin control”, durante la celebración de la Diada. La respuesta del PP fue: “Lo importante es no romper la unidad del bloque constitucionalista. Ahora estamos para sumar”.
Las gestiones de Martínez Maillo y Ábalos están dando resultados. Solo en la Comunidad de Madrid se han frenado cuatro mociones sobre el referéndum en consistorios como el de Majadahonda (gobernado por el PP) o el Ayuntamiento de Madrid, donde el PSOE va a retirar una moción en favor del diálogo para solucionar el problema de Catalunya. Fuentes del grupo municipal socialista explican que se ha presentado para ver si puede haber una posición común y que en caso de que no se pueda, se retirará.
Susana Díaz se tendrá que posicionar
El problema ha llegado al Parlamento andaluz donde Ciudadanos ha registrado la misma proposición no de ley en apoyo del Gobierno que el Congreso tumbó con los votos del PSOE, ya que Ciudadanos se negó a admitir una enmienda socialista que proponía el diálogo como solución.
La iniciativa de Ciudadanos no solo resquebrajó el bloque constitucionalista, además dividió al grupo socialista en el Congreso, donde cuatro diputados se abstuvieron, a pesar de que la dirección de Pedro Sánchez había decidido votar en contra de la proposición.
El movimiento de Ciudadanos en la Cámara andaluza ha enfadado a los socialistas, que recuerdan que no se han pronunciado en ninguna parte de España salvo en Baleares, donde el PSOE se abstuvo en una propuesta similar. En Ferraz entienden que el grupo de Susana Díaz tendría que actuar como lo hizo el PSOE en el Congreso. “Ellos sabrán, lo normal es que trataran de transaccionar con nuestra enmienda, pero no se lo vamos a pedir”, dicen desde Ferraz.
El acuerdo entre el PP y el PSOE no significa que se traslade a otros ámbitos. De hecho, los socialistas han pedido al PP de Zaragoza que retire una denuncia que presentaron contra un acto organizado por las Marchas de la Dignidad en favor del 1-O. Una jueza ha prohibido su celebración y los socialistas no quieren que el PP vuelva a presentar una denuncia si se celebra en una nueva ubicación.
En Ferraz ha sentado muy mal la actuación del PP en Madrid con la presentación de una denuncia contra un acto en favor del derecho a decidir en una consulta. Aunque permanecieron en silencio para evitar criticar una actuación judicial, los socialistas censuran la actitud de los conservadores. “Respaldamos al Gobierno, pero no al PP”, dicen desde la dirección de Pedro Sánchez: “No nos vamos a callar”.
El PSOE espera que los de Rajoy dejen de presentar este tipo de denuncias contra actos que, para ellos, no son preocupantes porque los circunscriben dentro de la libertad de expresión y así se lo ha manifestado la dirección de Sánchez a la cúpula de Génova.