El PSOE teme que Ciudadanos se eche atrás para derrotar al PP en Murcia
El PSOE quiere prudencia ante la posibilidad de echar al PP del poder en la Región de Murcia. En las filas socialistas desconfían de las verdaderas intenciones de Ciudadanos, con quien se reunirán este miércoles para explorar una posible moción de censura, y temen que solo les estén utilizando para presionar al partido de Mariano Rajoy.
Ciudadanos dio por roto el acuerdo con el PP por el que Pedro Antonio Sánchez logró la presidencia de la comunidad. El partido de Albert Rivera considera que la imputación de Pedro Antonio Sánchez es suficiente para que los conservadores pongan otro candidato. Pero el PP se resiste y el presidente trata de aferrarse en el cargo. Ahora dice que dimitirá si es “imputado formalmente”, obviando que lo está desde que el Tribunal Superior de Justicia de Murcia decidió investigarlo por cuatro delitos. El presidente murciano trata de ganar tiempo para ver si una vez escuchados los argumentos el tribunal decide retirar la acusación.
Antes y después de su declaración ante el juez, el PSOE ha ofrecido la posibilidad de presentar una moción de censura, que Ciudadanos asegura que va a estudiar.
Sin embargo, en las filas socialistas no las tienen todas consigo. Creen que Ciudadanos puede estar utilizándoles como medio de presión al PP. Así lo piensan en el partido a nivel regional y también en Ferraz, que ha manifestado su apoyo a la decisión que tome el secretario general, Rafael González Tovar, que mantiene contacto fluido con el responsable de organización de la gestora, Mario Jiménez, y que recibió el aval del presidente, Javier Fernández, el pasado viernes.
El portavoz de la gestora ha evitado pronunciarse directamente sobre la moción de censura y se ha limitado a emplazar a Ciudadanos a “reflexionar” después de que el presidente murciano haya incumplido el compromiso que alcanzó para su investidura de dimitir si era imputado. Tras declarar como investigado, lo ha aplazado hasta que haya una resolución judicial que mantenga o no esa condición.
Esa misma prudencia la comparten en el partido a nivel regional. “Estamos en permanente contacto y no queremos generar excesivas expectativas sobre la posible moción. Pero estamos trabajando en ella”, reconoce una dirigente murciana.
El plazo estimado que se ha marcado el líder socialista murciano es de quince días para llegar a un acuerdo con las otras dos formaciones, según fuentes de la formación. Tras la declaración de Sánchez, González Tovar ha asegurado que “hoy, más que nunca, está justificada” esa moción. “Ya no hay más opciones”, ha sentenciado.
Ciudadanos tiene en su mano la presidencia
En el PSOE preocupa que Ciudadanos se descuelgue de la moción una vez presentada. “Con la moción podrían forzar la dimisión de Pedro Antonio Sánchez, se convertiría en investidura y el PP podría poner a otro presidente”, explica un parlamentario. En Ferraz son conscientes de esa posibilidad y por eso prefieren que el PSOE murciano se lance a presentar la moción, una vez que tenga el pacto firmado y cerrado tanto con Ciudadanos como con Podemos. Las tres formaciones son necesarias para echar al PP, que tiene 22 escaños, frente a los 23 que tiene la oposición.
Lo que sí creen en el PSOE es que Ciudadanos seguirá adelante si el PP se enroca y mantiene al actual presidente. Los socialistas consideran que los conservadores no contemplan la posibilidad de que el partido de Rivera pacte con ellos y Podemos, pero sostienen que en la región están “muy calientes”.
Podemos también ve “un pequeño porcentaje” de posibilidad de que la moción de censura salga adelante y prefiere que, en primer lugar, se hable de la “voluntad” de presentarla. “Cuando veamos la voluntad clara de PSOE y Ciudadanos, hablaremos de las condiciones”, explica a eldiario.es el líder de la formación en Murcia, Óscar Urralburu, que asegura que están “dispuestos al 100%” al presentarla y “después plantear las condiciones”. Solo el PSOE tiene los diputados suficientes para presentar una moción de censura. “No sabemos a qué esperan PSOE y Ciudadanos”, agrega Urralburu.
Tanto PSOE como Podemos desconfían de las intenciones de Ciudadanos por si cambia en el último momento de opinión. No sería la primera vez: tumbó en septiembre la ley de radiotelevisión de PSOE y Podemos que inicialmente había firmado.