El PSOE aparta a su organización juvenil de la estrategia electoral del 26J
El PSOE está engrasando la maquinaria electoral. Al proceso de elaboración de listas que comenzó el sábado, se ha sumado este martes la composición del equipo que dirigirá la campaña del 26J. El equipo que pilotará la estrategia en el segundo intento de Pedro Sánchez por llegar a Moncloa es prácticamente el mismo que hace cuatro meses, pero cuenta con varias incorporaciones relevantes del núcleo duro del secretario general.
Lo que desaparece del organigrama es la presencia de la organización juvenil socialista en un momento en el que el PSOE admite que es entre los jóvenes y en las grandes ciudades donde tiene los grandes puntos débiles.
La dirección socialista ha aprobado este martes la configuración del Comité Electoral, que volverá a estar dirigido por el secretario de organización, César Luena. A él se incorporan dos de los hombres fuertes de Sánchez: Antonio Hernando, que ha pilotado las negociaciones, como portavoz; y Óscar López, que será vicecoordinador de estrategia y comunicación. La diputada Isabel Rodríguez será la segunda portavoz de ese equipo al que también se suma José Enrique Serrano, como enlace con el comité de expertos.
El que fue jefe de gabinete de los dos expresidentes socialistas también ha tenido un papel protagonista en las negociaciones pese a que se quedó fuera del Congreso el 20D, tal y como recordó Sánchez a los barones que le reclaman que garantice un puesto con escaño asegurado a Eduardo Madina. El diputado murciano Pedro Saura será adjunto a la coordinación del programa ante la previsión de que Meritxell Batet se centre en Barcelona, donde encabezará la candidatura si gana las primarias que ha puesto en marcha el PSC.
Entre los cambios respecto al Comité Electoral de las elecciones del 20D, hay otro notable: la desaparición de los espacios de juventud y grandes ciudades. Esos son los dos grandes retos de los socialistas, que han sufrido una importante caída en esos dos ámbitos. Esas áreas, coordinadas por María González Veracruz y Adriana Lastra, pasan a llamarse “movilización y redes” y “campaña en la calle”, respectivamente. Según Ferraz, no cambia nada dado que el objetivo en las redes es el nicho joven y la campaña callejera es el “equivalente” a la de grandes ciudades, según fuentes oficiales.
No obstante, el organigrama refleja la desaparición de Juventudes Socialistas. La responsable del área de juventud constituido para los anteriores comicios trabajaba “en coordinación” con el secretario general de la organización juvenil, Nino Torre. Pero ahora, con la modificación incluida, el área de “movilización y redes” que Ferraz equipara a la destinada a los jóvenes, su presencia desaparece.
La participación de los máximos dirigentes de Juventudes en los equipos de campaña se ha producido tradicionalmente. La organización juvenil socialista ha formado parte de los equipos que han dirigido las campañas al igual que tiene puestos natos para sus dirigentes en los órganos internos del partido, como el Comité Federal o la Comisión Permanente, que es el núcleo duro de la dirección del PSOE.
El líder de Juventudes, alineado con el sector crítico
En el caso de los comicios que se celebraron a lo largo de 2015, el secretario general de la organización juvenil formó parte del Comité Electoral por lo que estaba convocado a todas las reuniones. Este miércoles se celebra el primer encuentro del órgano interno y no está citado. Fuentes oficiales de la dirección del PSOE explican que la organización juvenil dependerá, en la campaña del 26J, del número dos de César Luena, Juan Ramón Ferreira.
Nadie esconde en las filas socialistas que la relación de Ferraz con la actual dirección de la organización juvenil no pasa por su mejor momento. En el sector más crítico del PSOE atribuyen la decisión de dejarla fuera a su cercanía al presidente asturiano, Javier Fernández, uno de los barones más críticos con Pedro Sánchez y alineado con Susana Díaz desde hace unos meses. Nino Torre apoyó, además, a Eduardo Madina en la batalla por la Secretaría General en 2014.
El distanciamiento quedó patente en enero, justo después de las elecciones generales, cuando Ferraz intentó apartar a Torre de su puesto al frente de la organización juvenil. Dirigentes afines a la dirección del PSOE presionaron a miembros de Juventudes para tantear la posibilidad de que pusieran fin a su mandato, según publicó La Sexta.