Patxi López se define entre Susana Díaz y Pedro Sánchez: ni “muleta” del PP ni “izquierda destilada”
Patxi López sigue dando pasos en su campaña por liderar el PSOE. La semana pasada abrió un crowfunding para captar fondos, aunque más modesto que el que unos días después anunció Pedro Sánchez, y este lunes Rafael Simancas ha explicado las líneas fuerza de su proyecto, que quedarán plasmadas en un documento que el exlehendakari dará a conocer en un acto este domingo.
Ese documento tiene dos objetivos fundamentales: ofrecer un proyecto que logre unir al PSOE en un momento de máxima división y también un discurso que López califica de autónomo. El diputado vasco se siente diferenciado de sus contrincantes -dan por hecho que Susana Díaz dará un paso pronto- tanto en su capacidad interna como en su modelo externo.
“A los socialistas no nos corresponde recortar los recortes del PP, ni recetar analgésicos para soportar mejor las políticas injustas de la derecha. Pero tampoco podemos podemos ser esa izquierda tan puramente destilada y tan extrema que resulta incapaz de generar confianzas mayoritarias”, dice el documento que ha redactado el equipo de López.
“El PSOE no se define ni por atemperar la derecha ni por configurar una minoría más en una suma confusa de minorías de izquierdas”, ha señalado Simancas, que apuesta por hacer “la revolución desde el BOE”. El diputado madrileño no ha mencionado a los rivales de López pero tampoco ha negado que se refieran a ellos cuando sitúan al exlehendakari en esa posición intermedia.
Para ejemplificar la definición, en la candidatura de López usan tres modelos europeos: frente a François Hollande -definido como “cómplice en alguna medida de políticas neoliberales- y Jeremy Corbyn -”una izquierda tan destilada y pura que es incapaz de articular mayorías“-, ”Patxi López apuesta por el modelo de Martin Schulz“, según ha explicado Simancas.
El proyecto que López presentará el domingo defenderá algunas posiciones en materia económica, como la necesidad de aumentar la recaudación sobre las grandes rentas y patrimonios o la derogación de la reforma laboral pero también en aspectos sociales y territoriales.
López se diferenciará de Sánchez en su apuesta territorial en la que apostará por reconocer las “singularidades” de algunos territorios, pero descartará la posibilidad de reconocer a España como un estado plurinacional. El exlehendakari quiere que el congreso del PSOE dé pasos para concretar la apuesta por un modelo federal que hacen los socialistas. Así, quiere que se definan las competencias exclusivas del estado y las comunidades y que se reconozca el sistema de financiación autonómica a través de la Constitución.
También especifica algunas de las propuestas orgánicas que ha lanzado en las últimas semanas de campaña. Así, plantea que el secretario general pueda ser revocado por los militantes a través de una moción de confianza -propuesta por el propio líder- o de una moción de censura apoyada por mayoría en el Comité Federal.
Las consultas a los afiliados es otro de los apartados que quiere abordar López: que se elabore un reglamento “de participación y decisión de la militancia”. La idea que propone es que las consultas las proponga la dirección federal, una mayoría del Comité Federal o el 20% de los militantes. En el caso de los acuerdos para gobernar, tendrá que solicitar la consulta al menos el veinte por ciento del Comité Federal.
Otra de las novedades de López es la redacción de un código de conducta para los militantes en las redes sociales para que la participación se base en “los principios de respeto mutuo, la participación constructiva y la máxima concordia”. Simancas ha explicado que será un código “voluntario”, no un régimen de “infracciones y sanciones”.
Al igual que ha hecho Sánchez, el exlehendakari ha conformado un equipo que ha trabajado en ese proyecto y que se ha agrupado en distintas áreas. En economía, López cuenta con Manuel de la Rocha Vázquez (que formó parte de la ejecutiva de Sánchez), José Luis Curbelo y Alain Cuenca. También ha incorporado a Alberto Pérez, que fue secretario de organización de UGT con Cándido Méndez. El exlíder sindical mantiene muy buena relación y contacto constante con Sánchez.
López cuenta con el apoyo de varios parlamentarios, como Pere Joan Pons, Eider Gardiazábal, Jesús Mari Fernández (sanidad), Guillermo Meijón (educación) y María Gonzalez Veracruz (que se encargará de transparencia y regeneración, como en la ejecutiva de Sánchez, a la que perteneció).
El equipo de López enfatiza que tienen dirigentes colaborando en todas las federaciones, incluida la andaluza, donde Susana Díaz pretende arrasar y Sánchez cuenta con apoyos como el alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano, o el de Chiclana de la Frontera. El exlehendakari tiene de su parte a Jose Antonio Gómez Periñán (exviceconsejero Gobernación y Justicia de la Junta) o Diego Asensio (Almería).
También tiene respaldo en el PSC (Joan Francesc Marco se ha encargado de la parte de cultura) y en el PSPV, otra de las federaciones relevantes. En Extremadura, el exlehendakari cuenta con el respaldo de Juanra Ferreira, que fue coordinador de organización con César Luena en Ferraz. Aunque el que fue número dos de Sánchez permanece en un segundo plano públicamente, está con el exlehendakari, como la mayoría barones que permanecieron fieles al exsecretario general. En Madrid, López cuenta con el apoyo de la secretaria general, Sara Hernández, y con el de su número dos, Enrique Rico, que ha participado en la parte orgánica del proyecto que López presentará el domingo.
Simancas ha emplazado a los demás candidatos a debatir cuando arranque oficialmente la competición y ha planteado que haya más de un debate. Así, ha planteado que se celebren discusiones sectoriales entre las distintas candidaturas.