Pedro Sánchez pide que a los díscolos solo se les imponga una multa económica por “proporcionalidad”
Pedro Sánchez pide a la gestora que pilota el PSOE que no imponga castigos más allá de una multa económica a los diputados que se saltaron la disciplina de voto en la investidura y mantuvieron el 'no' a Mariano Rajoy. El exsecretario general apela a la “proporcionalidad” del régimen sancionador y argumenta que el voto negativo de 15 diputados no alteró el resultado final.
“Ya ha habido sanciones pecuniarias, que son las establecidas en nuestro reglamento. Sumarle ahora a ello los ceses de portavocías y presidencias de los diputados del 'no', no hace más que ahondar en la fractura que sufre el PSOE”, argumenta Sánchez en un post en Facebook en el que recuerda que la multa fue la sanción que impuso el PSOE durante su mandato a los diputados que incumplieron la disciplina de voto, en casos como los aragoneses sobre la revisión del Plan Hidrológico del Ebro.
“También, muy al principio de mi andadura como secretario general, tuve que lidiar con el voto favorable de algún eurodiputado socialista español al entonces candidato a presidente de la Comisión Europea, el conservador Jünker, pese a que la dirección del PSOE había decidido que nuestros/as eurodiputados debían votar en contra”, dice Sánchez, aunque los eurodiputados socialistas acabaron acatando la decisión pese a las discrepancias.
El exsecretario general pide a la gestora que trabaje por la “unión”: “Es el momento de cambiar de registro. Unamos al partido y a nuestro grupo parlamentario”. Sánchez manda un mensaje, además, a la dirección para tratar de evitar la destitución de Margarita Robles en la presidencia de la Comisión de Justicia: “Hagamos oposición al PP, no oposición a nosotros mismos. Centrémonos en que políticos como Jorge Fernández Díaz no ocupen la presidencia de comisiones parlamentarias, no en que no lo hagan diputados socialistas”.
Sánchez sostiene que la votación de la investidura fue un momento “extraordinariamente difícil” en el que “las circunstancias de cada cual” eran “diferentes”.
En su caso, recuerda, “fue un conflicto insuperable” y acabó dejando su acta de diputado, pero el resto de diputados que defendían el 'no' también expresaron, durante los días previos a la votación, “razones poderosas para separarse de la disciplina del partido”. Tanto es así, señala, que el debate sobre la abstención y la abstención técnica “dividió al PSOE a los ojos de los ciudadanos”.
