Pedro Sánchez trata de trasladar la presión a los 'comunes'
Cuenta atrás para que los catalanes acudan a las urnas y los socialistas están convencidos de que mantienen una tendencia alcista; pero apelan a una gran movilización que les coloque en una situación de ventaja respecto al resto de sus competidores. El PSC cree que tiene hecha la transversalidad con su acuerdo con Units Per Avançar e intenta crecer por su izquierda. Pedro Sánchez, que arropa a Miquel Iceta este fin de semana, trata de trasladar la presión a los 'comunes'.
El secretario general del PSOE ha lanzado reproches a En Comú desde Girona y también en la provincia de Barcelona, donde se ha referido a los 'comunes' como la izquierda que “se dice casta y pura que acaba siguiendo con su agenda a los independentistas”. “Tantos meses guardando el equilibrio, que se caen del lado equivocado, el del independentismo”, ha insistido. Sánchez ha cargado especialmente contra Ada Colau por romper el acuerdo de Gobierno con el PSC.
También Miquel Iceta ha apelado a la movilización del PSC: “Si no queremos independentismo ni giro a la derecha necesitamos que toda la izquierda se venga con nosotros”, ha expresado en un mitin-comida al que ha asistido el candidato en Terrasa, ciudad en la que dimitió el alcalde socialista por el apoyo del PSC al 155 y que el partido ha conseguido mantener, aunque en otras manos.
La estrategia de atacar a los 'comunes' busca rentabilizar el voto útil de la izquierda ahora que las encuestas pronostican un derrumbe para la candidatura que encabeza Xavier Domènech. “El único voto de izquierdas es el del PSC”, ha dicho Sánchez en un acto celebrado con jóvenes socialistas en Barcelona.
A por el voto útil
Sánchez ha hecho un “llamamiento a la mayoría cautelosa” en ese mismo mitin y ha asegurado que ésta puede “maximizar su voto” si se lo da al PSC. “¿Cuál es el objetivo? El objetivo, a mi juicio, es que haya un presidente no independentista. Solo encuentro un candidato, que es Iceta, que pueda aunar el apoyo de todas las fuerzas políticas no independentistas”. “Si quieres maximizar tu voto a Miquel Iceta tienes que votar”, ha expresado Sánchez parafraseando a Iceta, que siempre dice: “Si la financiación autonómica quieres mejorar, a Miquel Iceta has de votar”.
“No están arañando nada. Están perdiendo. No tienen ninguna campaña -señala un alto mando de Ferraz sobre los 'comunes' para explicar por qué no sirve, en su opinión, que el voto de izquierdas vaya a esa candidatura-. Están diciendo que quieren un pacto con nosotros y ERC y sale Gabriel Rufián al día siguiente diciendo que no pacta con carceleros, en referencia a los socialistas”.
Esa táctica pasa, además, por que Sánchez recuerde siempre que puede que Mariano Rajoy está en el poder porque Pablo Iglesias no quiso apoyarle en su investidura. “Me acusan de estar cerca del PP, pero yo me presenté a una investidura y quienes votaron en contra fueron otros”, ha reiterado este sábado.
Fuentes de la dirección del PSOE sostienen que Podemos y En Comú no pueden permitirse votar de nuevo en contra de un candidato socialista y están convencidos de que Iceta tiene más posibilidades que Inés Arrimadas de conseguir ese apoyo pese a quedar por detrás en votos y en escaños. “A ver cómo lo explican ante su electorado”, dicen esas fuentes.
La activación de los votantes de izquierdas puede servir, según un alto mando del PSOE, para que el PSC se acerque a Ciudadanos. Aunque ninguna encuesta lo pronostica y tampoco se atreven a darlo por hecho, creen que la candidatura de Arrimadas está “hinchada” en los sondeos y que la distancia entre ambas fuerzas no va a ser grande.
De ahí que confíen en que se reedite el intento de acuerdo transversal que fracasó en el Congreso en 2016. Incluso piensan que los 'comunes' están “preparando el terreno” en ese sentido al decir que no harán presidenta a Arrimadas. No obstante, la candidatura de Domènech sigue descartando dar sus votos a una ecuación que incluya a Ciudadanos.
“Lo interesante es qué hacen los nuevos partidos al día siguiente de las elecciones”, señalan en Ferraz, donde insisten en que Iglesias y Albert Rivera “tendrán que sentarse”. Hace casi dos años fue prácticamente imposible. Sánchez se sacude, así, la presión y se la traslada a sus rivales.
Los socialistas solo ven factible que, si el bloque independentista no obtiene mayoría absoluta, Iceta llegue a la presidencia apoyado por Ciudadanos, PP y los 'comunes'. Descartan otras fórmulas, como la que defienden los 'comunes', que es una reedición del tripartito entre ERC, PSC y Catalunya En Comú Podem. Rechazan cualquier entendimiento con los republicanos catalanes, a los que consideran “tóxicos”. No les sirve que sus votantes avalen mayoritariamente esa fórmula y no se creen el paso atrás en la unilateralidad que esboza ERC.
“He esbozado una ligera sonrisa”, fue el comentario de Sánchez cuando en el acto de conmemoración de la Constitución en el Congreso Iglesias le dijo que el 'candidato Borgen' es Domènech basándose en que es el único que podría superar los vetos de ERC y del PSC. “Siendo el tercero [del bloque] no es posible. No puedes ser presidente con ocho diputados cuando el otro te saca 15 o 20”, dicen fuentes socialistas que insisten en que Iceta no tendría tanta distancia con Ciudadanos en caso de que consiga ser presidente pese a quedar por detrás.
