El líder de Podemos en Cataluña pierde el control de la estrategia electoral tras meses de disputas con Iglesias

La última disputa que ha protagonizado el secretario general de Podemos en Cataluña (Podem), Albano Dante Fachin, con la dirección estatal le ha llevado a perder el control de la estrategia electoral de su organización, en un momento clave para el futuro de Cataluña.

El Consejo Ciudadano Estatal de Podemos --el máximo órgano de dirección entre asambleas-- decidió a última hora de este domingo, en una reunión telemática de urgencia, tomar las riendas de Podem y convocar una consulta para que los inscritos en Cataluña decidan si quieren aliarse con el nuevo partido de los 'comunes' de la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau.

FACHIN FRUSTRA LA ALIANZA CON LOS 'COMUNES'

Precisamente esta alianza es el origen de gran parte de las disputas que afectan desde hace meses la relación entre Podemos y su marca catalana, después de que Fachin frustrara un pacto para que Podem se integrara en el nuevo espacio bautizado como Catalunya en Comú, cuando el acuerdo estaba prácticamente sellado.

Iglesias ya mostró entonces su profunda decepción por la decisión de Fachin y, desde entonces, ha dejado ver en numerosas ocasiones que su principal referente en Cataluña no es Podem sino el nuevo partido de los 'comunes'.

La brecha abierta entre la dirección estatal y su filial catalana aumentó con el posicionamiento adoptado ya hace unos meses por Fachin ante el referéndum de independencia que preparaba la Generalitat para el 1 de octubre.

DISCREPANCIAS SOBRE EL 1-O

Cuando Iglesias y los suyos se cuidaban por mantener una equidistancia calculada ante esa cita, evitando las muestras de apoyo, Fachin fue un paso más allá y abogó a principios del mes de julio por participar “activamente” en la consulta del 1-O, entendiéndola como una “movilización”, pese a no compartir el “formato”.

“No hay que criminalizar esa movilización política pero yo, si fuera catalán, no participaría en ese referéndum”, aseguró entonces Iglesias, desautorizando a su líder en Cataluña, en un momento en el que las discrepancias entre uno y otro eran ya palpables.

Semanas más tarde, a finales de julio, Fachin anunció la celebración de dos consultas entre sus militantes, una en septiembre para decidir el grado de implicación de Podem en el referéndum del 1-O, y otra a finales de octubre sobre la alianza con los 'comunes', que nunca se llegó a convocar.

FACHIN SE NIEGA A CONVOCAR UN CONGRESO DE PODEM

Sin embargo, las consultas anunciadas por el líder de Podem no cumplieron con las expectativas de la dirección estatal, que había recomendado a Fachin convocar “una Asamblea Ciudadana Autonómica completa”, es decir, un congreso para decidirlo todo, incluido la renovación de la cúpula de Podem, además de la estrategia política.

Fachin reconoció días después, a principios de agosto, en una entrevista, que la recomendación había ido más allá, y que le habían pedido que dimitiera, una acusación que fue rechazada por el secretario de Organización estatal, Pablo Echenique.

Tras el verano, se produjo la primera consulta convocada por Podem, en la que los inscritos del partido en Cataluña decidieron entender el 1-O como una movilización, y participar en el referéndum en ese sentido. Esta fue finalmente también la postura asumida por la dirección, pero las discrepancias entre Iglesias y Fachin se habían vuelto a plasmar durante la Diada del 11 de septiembre.

Aquel día, el líder de Podemos participó en un acto junto a la alcaldesa de Barcelona y el coordinador de Catalunya en Comú, Xavier Domènech, mientras que el secretario general de Podem acudió al convocado por los soberanistas de Procés Constituent, a favor de al “república catalana”.

Las tensión siguió aumentando, al igual que el distanciamiento entre la dirección estatal y autonómica, hasta que el comportamiento de Fachin y otros diputados de Podem durante el Pleno del Parlament del viernes, en el que se declaró la independencia de Cataluña, ha convertido esas discrepancias en insalvables.

LA DIRECCIÓN ESTATAL INTERVIENE

En la resolución aprobada por la dirección estatal de Podemos este domingo, Iglesias y su equipo reprochan a Podem no haber informado del sentido de sus votos en la citada sesión. A su juicio, “la falta de información” y el comportamiento de dichos diputados en el desarrollo de la votación “generaron una situación de intranquilidad en este órgano y en toda la Organización” y “dañaron” su “prestigio político”.

En segundo lugar, la Ejecutiva de Podemos rechaza que tres de los cuatro diputados de Podem no votaran en contra “de una de las dos resoluciones que hablaba específicamente de la Constitución de una nueva república catalana a partir de la votación del Parlament”. Además, señalan que una diputada de Podem no votó en contra de la Declaración de Independencia y saludó públicamente la “nueva república catalana”.

En esta línea, también desautorizan el comunicado emitido este domingo por los anticapitalistas, en el que Podemos entiende que han reconocido la “nueva república catalana”, provocando incluso “el desmarque público de algunas de las figuras más relevantes de esta corriente”, en referencia a la líder andaluza, Teresa Rodríguez, y el alcalde de Cádiz, José María González 'Kichi', que se han desvinculado.

FRENO A LAS NEGOCIACIONES DE FACHIN CON INDEPENDENTISTAS

La dirección estatal también reacciona ante las intenciones manifestadas por Fachin de “formar un bloque con otras fuerzas políticas”, tras cuestionar la conveniencia de las elecciones de diciembre. De hecho, la dirección catalana había aprobado este mismo domingo iniciar negociaciones con otras fuerzas.

A este respecto, Podemos recuerda en su resolución, a la que ha tenido acceso Europa Press, que Catalunya en Comú, con quien aspiran a concurrir en los comicios de diciembre, ha dejado claro que no se presentará con ninguna fuerza política independentista.