Podemos fuerza su maquinaria electoral a diez días de las catalanas
“Podemos está volcado en estas elecciones”. La frase de la secretaria de Programa de Podemos, Carolina Bescansa, no es una frase hecha. A diez días del 27S, Pablo Iglesias e Iñigo Errejón se han instalado en Cataluña para apoyar la candidatura en la que se integra el partido, Catalunya Sí que es Pot (CSQP), junto con ICV y EUiA. Aunque Podemos había diseñado una potente participación de su secretario general, la número tres del partido aseguró este miércoles que Iglesias permanecerá en Cataluña durante la última semana de la campaña, excepción hecha del viaje relámpago a Atenas para acudir a un mitin de Alexis Tsipras.
Junto a Iglesias también ha aterrizado su número dos, Iñigo Errejón. El secretario de Política de Podemos dirige la campaña de CSQP, pero el partido ha optado por enviar al estratega a Barcelona para dar solución a los problemas de coordinación que han surgido entre los distintos componentes de la candidatura.
El 27S debía servir a Podemos de trampolín para las generales. Con implicación de los líderes más carismáticos y reconocibles pero evitando monopolizar el mensaje. Que no pareciera que se controlaba la campaña desde Madrid. Podemos contaba con utilizar las elecciones catalanas para emerger como opción alternativa a los mensajes bipolares de una campaña que se ha planteado en clave plebiscitaria. Entre quienes defienden independencia sí o independencia no, el partido de Iglesias planeó un mensaje transversal que movilizara a los catalanes que, creen, no están preocupados por este debate sino por el mantenimiento de los servicios públicos y los derechos laborales.
“Sabemos que las elecciones son decisivas para resolver un problema de articulación territorial”, señaló Bescansa el martes en la rueda de prensa posterior a la reunión de la ejecutiva. “Pero también para resolver lo que ocurre con los hospitales, las escuelas y la democracia en Cataluña”, añadió.
El mensaje central pasa por mostrar las similitudes entre las “supuestas” opciones divergentes. Entre Convergència, PP y Ciudadanos. Este mismo miércoles, Errejón hablaba ante la prensa de los “siameses [Albert] Rivera y [Mariano] Rajoy”. Por la mañana, Bescansa cambiaba el foco y aseguraba que “Ciudadanos representa en Cataluña lo mismo que Mas”. La secretaria de Programa explicó que ambos ofrecen “una salida unilateral a un problema que hay que resolver”, el del encaje territorial de Cataluña. Y añadía: si repasamos las votaciones en los últimos cinco años, Ciudadanos ha apoyado a CiU una y otra vez en todas las medidas claramente antisociales“.
La encuesta del CIS del pasado día 10 revelaba además dos circunstancias que ponían en riesgo esta estrategia. Junts pel Sí y las CUP sumaban mayoría absoluta. Y Ciudadanos superaba a Catalunya Sí que es Pot. Además, el PSC pisa los talones a la candidatura
Podemos defiende, como viene haciendo casi desde su surgimiento, que suele reponerse a las encuestas y que, en campaña, se crecen. Bescansa, responsable también de Análisis Político y Social del partido, cree que los sondeos deben usarse con cautela. “Respetamos al CIS y al resto de empresas demoscópicas, pero nunca ha sido tan difícil hacer pronósticos como es ahora. Vamos a esperar al día 27”, ha señalado.
La número tres de Podemos considera que el candidato de Catalunya Sí que es Pot, Lluís Rabell, estará en condiciones de presentar una propuesta de investidura. De no ser así, CSQP se encontrará ante un dilema complicado. Pablo Iglesias aseguró que nunca permitirían “ni por activa ni por pasiva” que Artur Mas sea presidente de Cataluña. Este miércoles, Bescansa señalaba que tampoco recibiría nunca su apoyo, “porque nunca vamos a pactar con recambio del PP”.